ÁLVARO DE LUNA (Favorito del rey Juan II de Castilla)

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ÁLVARO de Luna penetrará con las tropas castellanas por la merindad de Estella en el territorio navarro


ÁLVARO de Luna penetrará con las tropas castellanas por la merindad de Estella en el territorio navarro para evitar que este se convierta, como ha ocurrido en ocasiones anteriores, en plataforma de las tropas enemigas.

Esta pieza también aparece en ... CORONA DE CASTILLA (1230-1716) • REINO DE NAVARRA (1162-1516)

Victoria de Higueruela. ALVARO de Luna lleva a Castilla a protagonizar acciones de singular trascendencia.


La oligarquía gobernante tras la guerra, que sigue teniendo al rey absolutamente dominado, continúa con sus pugnas y rivalidades internas. ALVARO de Luna, por su parte, sigue en primera línea y lleva a Castilla a protagonizar una serie de acciones de singular trascendencia. Mientras se consolida la hegemonía en el golfo de Vizcaya y se firma la paz con Portugal, se emprende la lucha en Granada que representará el protectorado de Castilla sobre este reino tras la victoria de Higueruela (1de agosto de 1431) y, luego, como Muhammad VIII se hace con el poder, la conquista de varias plazas que corre a cargo de los caballeros fronterizos.

Esta pieza también aparece en ... CORONA DE CASTILLA (1230-1716)

El poder absoluto de ÁLVARO de Luna provoca el enfrentamiento de la nobleza con nuevas purgas.


Tras la boda de ENRIQUE de Castilla y BLANCA de Navarra, el condestable ÁLVARO de Luna, hace considerables gestos de acercamiento a JUAN II de Navarra. Pero el poder absoluto de ÁLVARO de Luna provoca el enfrentamiento de la nobleza con nuevas purgas, enfrentamientos, encarcelamientos y deslealtades hasta llegar a la sublevación de una parte considerable de la nobleza.

ÁLVARO de Luna llama a los infantes de Aragón con la promesa de devolverles sus posesiones.


Los nobles de Castilla se han hecho con Valladolid y, poco a poco, van aumentando su poder. Después de varias conferencias, ÁLVARO de Luna llama a los infantes de Aragón con la promesa de devolverles sus posesiones. Éstos regresan, pero cada uno lo hace situándose en bandos distintos: JUAN II de Navarra en la Corte, junto al rey de Castilla y ENRIQUE junto a los nobles sublevados. Ante lo desesperado de la situación, ÁLVARO de Luna propone una nueva conferencia, que tiene lugar en Tordesillas. Allí, al tratarse como tema básico la forma en que el rey debe capitular más que de una posible paz, JUAN II de Castilla tiene un gesto de autoridad y la suspende.

ÁLVARO de Luna es enviado de nuevo al destierro y Enrique y Juan retornan al poder.


El gesto real tiene dos consecuencias. Sus partidarios lo interpretan como un deseo de seguir luchando y, ante ello, JUAN II de Navarra cambia de bando. Tras una nueva reunión, esta vez en Castronuño, ÁLVARO de Luna es enviado de nuevo al destierro en su señorío de Ayllón y los infantes ENRIQUE y JUAN II de Navarra retornan al poder.

La actuación de Juan y Enrique en contra de la postura del rey anima a ÁLVARO de Luna a regresar.


Se reúnen Cortes en Valladolid, donde se define el programa de la oligarquía gobernante. La intervención de los infantes en los asuntos portugueses, jugando en contra de la postura de JUAN II de Castilla, y los resultados adversos que consiguen anima a ÁLVARO de Luna a intentar su regreso.

JUAN II de Castilla vuelve a ser prisionero de los infantes aragoneses y ÁLVARO de Luna queda confinado.


Durante cinco meses la lucha abierta se muestra favorable a ÁLVARO de Luna pero, inesperadamente, JUAN II de Castilla es entregado a su homónimo el rey de Navarra. Ante ello, ÁLVARO de Luna tiene que huir apresuradamente. JUAN II de Castilla vuelve a ser prisionero de los infantes aragoneses y ÁLVARO de Luna queda confinado. Así, pues, JUAN II de Navarra, vuelve a hacerse con el mando en Castilla de nuevo al lado de los enemigos del condestable ÁLVARO de Luna.

Los infantes de Aragón son los dueños absolutos de Castilla, poseedores de la persona del rey.


Los infantes aragoneses que han procedido a reformar el Consejo Real de Castilla continúan con su política de intervención en Portugal, apoyando a su hermana, LEONOR, que ha sido despojada de su regencia. La cuestión portuguesa vuelve a ser el fulminante y JUAN de Navarra, que prepara su boda con la hija del almirante Enríquez, da un golpe en Ramaga, expulsa o prende a todos los partidarios de ÁLVARO de Luna y a partir de la fecha, reduce al rey JUAN II de Castilla a una posición casi de cautividad. Los infantes de Aragón son los dueños absolutos de Castilla, poseedores de la persona del rey, JUAN reina en Navarra y es el lugarteniente de ALFONSO V en Aragón, Valencia y Catalunya. ÁLVARO de Luna se constituye en defensor de la libertad.

Los ejércitos de JUAN II de Navarra se enfrentan en Olmedo con las tropas leales al rey de Castilla.


Los ejércitos de JUAN II de Navarra se enfrentan en Olmedo con las tropas leales al rey de Castilla y a ÁLVARO de Luna. Derrotado JUAN II, marcha a Navarra para centrarse allí en sus funciones reales. ENRIQUE, hermano de JUAN II de Navarra, muere en esta batalla que inicia la segunda guerra entre Castilla y Aragón (1445-1454) y esta vez, también con la intervención de Navarra. Esta guerra es muy original; son más frecuentes las treguas que las acciones militares; es una pugna entre bandos aristocráticos, partidarios unos, contrarios otros, de los infantes de Aragón.

ÁLVARO de Luna da un golpe de estado en Zafraga y se hace con el poder absoluto.


En la corte vuelven a configurarse, pese a todo, dos poderes: por un lado, el del príncipe heredero, ENRIQUE, que aparece como el apaciguador tras la batalla y que se apoya en Juan Pacheco y su hermano Pedro Girón y que defiende la política de la nobleza; por otro, el del valido de JUAN II rey de Castilla, ÁLVARO de Luna, que pretende reforzar la autoridad real. A raíz de esta pugna, el condestable da un golpe de estado en Zafraga (11 de mayo de 1448) y se hace con el poder absoluto. Pero aquello significa una nueva lucha en campo abierto que le coloca en la difícil situación cuando la derrota del portugués duque de Coimbra en la batalla de Alfarrobeira le priva del apoyo que le llegaba de Portugal.