Thiers proclama la república en Versalles. Pero Francia considera que ya basta de confusión republicana, y se elige una nueva Asamblea Nacional en la que obtienen mayoría los monárquicos. Los obreros de la capital -sin embargo- se oponen a la Asamblea Nacional tomando la ciudad y llamándola «Comuna de París» como paso previo a una «federación de comunas» francesa. Comienza la «Semana sangrienta» (21-28 de mayo). El ejército toma la ciudad; instaurando una brutal represión que acabará con la muerte de veinte mil comuneros. Parece como si la Tercera República vaya a durar aún menos que las dos anteriores. El problema radica en la clase de monárquicos que hay. Los legitimistas apoyan a Henri-Dieudonné d’Artois, conde de Chambord, nieto de Carlos X. Los orleanistas se pronuncian en favor de Louis-Philippe-Albert, conde de París, nieto de Luis Felipe. Y los bonapartistas quieren un Bonaparte. Por un momento, parece que va a llegarse a un acuerdo general para permitir que Chambord reine como Enrique V. Luego, como no tiene hijos, le sucedería el conde de París como Luis Felipe II. Pero Chambord insiste en que no reinará a menos que Francia acepte la bandera blanca prerrevolucionaria en lugar de la tricolor. Esta propuesta no es aceptada de manera que se acepta la Tercera República, como un sistema de gobierno “temporal”, que será reemplazado por la monarquía al morir el Conde de Chambord, y al sucederle el Conde de París.

La Comuna de París mantiene el control de la capital hasta que las tropas gubernamentales retoman la ciudad tras la Semana Sangrienta (21-27 de mayo), que supone una represión no sólo del movimiento comunal, sino también de las fuerzas progresistas francesas en general. En efecto, ante las miradas del ocupante prusiano (que sin duda se regocija cínicamente), el ejército francés toma París, destruye la comuna (que ha durado sólo once semanas), y a continuación se dedica a las ejecuciones y los asesinatos indiscriminados.

El golpe de estado que ocurre en París después de la derrota con Prusia y el brusco cambio político obligan a la familia española de ISABEL II y sus hijos a dejar la capital francesa, sumida en un caos. Se trasladan a Ginebra y viven casi un año en un hotel de aquella ciudad.

La pérdida de Alsacia y Lorena en 1871 nunca será aceptada por Francia. Por ello la política del canciller alemán BISMARCK consistirá en evitar que Francia consiga aliados para un enfrentamiento con Alemania, lo que requerirá que ésta mantenga buenas relaciones tanto con Austria-Hungría como con Rusia, que a su vez son rivales en los Balcanes.

Mientras tanto, Alemania se irá industrializando con rapidez, sobrepasando pronto a Francia y aproximándose a la rivalidad con Gran Bretaña. Incrementará su producción de hierro y acero espectacularmente, se transformará en una de las grandes potencias comerciales del mundo, y sus ciudades crecerán aprisa. Tanto en lo militar como en lo económico, Alemania logrará la supremacía europea; o sea la posición que tuvo Francia con Luis XIV y España con Felipe II.

En Francia, THIERS es investido presidente provisional de la III República de Francia, el 31 de agosto de 1871. Conseguirá organizar las finanzas de tal manera que la cuantiosa indemnización fijada por los prusianos quedará liquidada. Por otra parte, el gobierno francés orienta sus objetivos a la expansión ultramarina y establece un imperio colonial en África y Asia, tan grande como el imperio que ha perdido en el siglo XVIII y segundo en extensión después del Imperio Británico.

Las cuatro décadas que siguen serán años de estabilidad para Francia, aunque el crecimiento económico no será espectacular ni próspero para la burguesía y el campesinado constituirán, sin embargo, una de las grandes etapas creativas del arte y la literatura franceses. Primero los pintores impresionistas, y después la vanguardia de Henri Matisse, Georges Braque y otros convertirán a París en la capital mundial del arte. Una pléyade de escritores como Émile Zola, Anatole France, Paul Verlaine, Guy de Maupassant, Victor Hugo, Charles Cros, Arthur Rimbaud y Guillaume Apollinaire enriquecerán la literatura francesa.

Fallece, en la fecha, NAPOLEÓN III. Durante los 20 años que ha durado el reinado de NAPOLEÓN III, la economía francesa ha experimentado un auge extraordinario. Ha aumentado el comercio y ha resurgido la industria, el tendido del ferrocarril y la organización bancaria. Ha sabido atraerse a buen sector de la clase obrera, promulgando alguna legislación social. y ha tratado de no enemitarse con la burguesía liberal. Tras perder la guerra franco-prusiana, muere derrocado, en la fecha, en su exilio inglés.

En la fecha, se publica en Francia de manera íntegra la novela “La vuelta al mundo en ochenta días” de Julio Verne. Las peripecias del inglés Phileas Fogg y de su ayudante Jean Passpartout (pass par tout, es decir “Sirve” “Para” “Todo” ) constituyen uno de los relatos más cautivantes producido por la imaginación humana, y una de las joyas de la literatura de todas las épocas. Esta historia lleva a un proceso legal a Julio Verne ya que Edoaurd Cadol, después de haber tenido una breve e infructifera relación para poner una obra de teatro en escena, pretendía ser coautor de la obra, finalmente no hubo juicio, pero llegó a obtener tantos derechos sobre la pieza, como Julio Verne.

Concluida su tarea, Thiers, presidente de la III República francesa, que se ha opuesto a los monárquicos, es sustituido, el 24 de mayo de 1873, por el mariscal conservador Mac-Mahon. Mac-Mahon es monárquico, y considera que su tarea consiste en allanar el camino para que los condes de Chambord y de París se sucedan en el trono.