En el año 311, unos ochenta obispos de Numidia -(Concilio de Cartago)- declaran nulo el ordenamiento de CECILIO, obispo de Cartago, con el argumento de que la ceremonia ha sido presidida por un obispo “traditor”, que había entregado libros sagrados para que fuesen quemados por los perseguidores oficiales. Eligen a otro obispo -MAYORINO- influenciados por los sobornos de Lucila, una acaudalada matrona enemistada con CECILIANO.- en el lugar de CECILIO. Pero, como señalará el propio CECILIO, muchos de los ochenta obispos a su vez habían sido “traditores”. Por ello se niega a renunciar.

En China, los ambiciosos SUI han sobreexplotado los recursos del Imperio. En 618, dentro de una período de anarquía, YANG-TI es asesinado por sus guardias de corps y la dinastía SUI es reemplazada por la TANG (618-907) -que tienen el apoyo de los turcos-, con capital en Changan (actual Xian). LI YUAN -que toma el nombre de Gaozu- es el primer emperador (618-627). Bajo esta dinastía, China conocerá una edad de oro, caracterizada por una intensa actividad administrativa, la puesta en marcha de una reforma agraria y un importante desarrollo científico y cultural. Será un régimen poderoso y políticamente unitario que se establece para terminar con la situación caótica y separatista que ha predominado durante más de 300 años en China.