Los fragmentos de un cráneo de “Homo antecessor” de la época de la glaciación Mindel, uno de los más antiguos encontrados en Europa serán localizados en la Cova de l’Aragó entre el macizo de les Corberes y la sierra de les Gavarres, en el actual sur de Francia, cerca de Perpinyà (Rosselló). Se le denominará “Home de Talteüll”. Se trata de un hombre de pequeña estatura que anda completamente derecho. Es de una especie que produce instrumentos y domina el fuego.

Los vestigios arqueológicos indican que la presencia humana en el actual territorio francés comienza hace al menos 100.000 años.

Las culturas reconocidas más antiguas en territorio francés, son las del paleolítico que dejarán una rica herencia artística de pinturas rupestres, las más famosas de las cuales se encontrará en Lascaux, en el actual departamento de Dordoña, en el suroeste francés.

En el arte paleolítico, los motivos pictóricos generalmente parten de su principal preocupación: la supervivencia como grupo, así que la representación de los animales que son objeto de caza los símbolos de la procreación, constituyen los motivos más frecuentes. Se piensa que las pinturas tenían el efecto religioso o mágico de invocar para facilitar la caza y los nacimientos. En general, se interpretan ambos artes, el parietal y el mobiliar, como representaciones ligadas a rituales mágicos, quizá propiciatorios de la fertilidad humana y también de la fertilidad de animales y plantas. El arte mueble se encuentra en toda Europa; el parietal se concentra en Francia, la Península Ibérica y la Itálica.

En territorio francés, los pueblos del mesolítico (8000-5000 aC.) son recolectores de alimentos al igual que sus antecesores, pero dejarán relativamente pocos restos.

Los agricultores del neolítico, por su parte, levantan miles de monumentos de piedra en Francia, algunos de los cuales llegarán hasta nuestros días, como los menhires de Bretaña, los menhires-estatua del sur de Francia y los dólmenes, o tumbas de cámara, del valle del Loira, París y la Champaña, todo ello ligado al fenómeno megalítico.

En territorio francés, durante la edad del bronce (2000-700 aC.) y la edad del hierro (entre los siglos VIII y II aC.) emergen culturas más complejas.

La segunda oleada celta desde el centro de Europa, se inicia en el siglo VIII aC y propagará la cultura Hallstatt por Francia, España, Portugal, los Países Bajos y en el año 500 aC se extenderá por el sur de Gran Bretaña.