El 27 de abril de 1960, en una transición discreta, Togo corta sus lazos constitucionales con Francia, muda su estado de administración fiduciaria de Naciones Unidas, y se hace totalmente independiente conforme a una constitución provisional con Sylvanus Olympio como presidente que iniciará una política prooccidental, aunque será asesinado en 1963.

Un grupo de suboficiales asesina a Sylvano Olympio, presidente de Togo, y devuelve el poder al depuesto N. Grunitzky.

Fallece, en la fecha, el presidente de Togo, Gnassingbé Eyadema.

Fallece de un ataque cardíaco Gnassingbé Eyadema, gobernante de Togo. Tras su muerte, los militares nombran al hijo de Gnassingbé Eyaéma, Faure Essozimna Eyadéma (también llamado Faure Gnassingbe) presidente, en lugar del presidente de la Asamblea Nacional, Fanbare Tchaba quién, al momento de la muerte del gobernante estaba en el extranjero. Para legitimar este nombramiento, la Asamblea se reune rápidamente y nombra a Faure como presidente de la Asamblea. Por todo esto, la Organización de la Unidad Africana, la Unión Europea y las Naciones Unidas califican esta sucesión de poder como un golpe de estado. La Asamblea Nacional también elimina el requerimiento de llamar a elecciones en 60 días, de manera que Faure Eyadéma podrá gobernar hasta el final del período de su padre en 2008.

En Togo, después de la muerte de Gnassingbé Eyadema, el poder es ocupado, en la fecha, por su hijo, Faure Gnassingbé, apoyado por las fuerzas armadas.