HISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA. De Constantino al Concilio de Trento (313 - 1545)

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Historia de la Igleisa CatólicaHISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA. De Constantino al Concilio de Trento (313 - 1545)

Los habitantes del Imperio desean en gran número hacerse cristianos por oportunismo.


Hasta la paz de la Iglesia del 313, hacerse cristiano ha conllevado el riesgo del martirio. A partir de este momento todo cambia. Los habitantes del Imperio desean en gran número hacerse cristianos por oportunismo, a la vez que rechazan las exigencias morales del bautismo. Por otra parte, la catequesis previa al ingreso en la Iglesia, además de ser poco exigente, se eterniza, pues los catecúmenos, retrasan el bautismo hasta la vejez o la muerte. En efecto, como el bautismo perdona todos los pecados y la penitencia no se concede más que una sola vez en la vida, más vale esperar a que se extingan las pasiones para comprometerse definitivamente. También la Iglesia se desinteresa de esta comunidad catecumenal subdesarrollada para dedicar su atención a aquellos que efectivamente piden el bautismo para una fecha cercana. Éstos se inscriben al comienzo de la Cuaresma, que se convierte en el marco temporal de la preparación. La consecuencia de todo ello es que el nivel de formación baja sensiblemente y se extiende una profunda laxitud en todos los aspectos de la Iglesia que será contrarrestada a lo largo de los años con la aparición y arraigo del monacato.

El emperador más o menos cristiano, determina qué punto de vista es herético y cuál “ortodoxo”


Mientras el cristianismo ha sido una religón más o menos fuera de la ley, los obispos han podido disputar entre ellos a propósito de puntos doctrinales, lo que ha dado lugar a las que se llamarán “herejías” (de una palabra griega que significa “escoger”, en el sentido de “escoger cada cual su punto de vista”). Como consecuencia de ello, se han suscitado interminables querellas y polémicas. Ahora bien, una vez la religión cristiana se coloca bajo un emperador más o menos cristiano, éste último es el que, determina qué punto de vista es herético y cuál “ortodoxo” (de una palabra griega que significa “opinión verdadera”).

Se forma la Archidiócesis de Tarragona que, de hecho, es la Sede Primada de Hispania.


Se forma la Archidiócesis de Tarragona que, de hecho, es la Sede Primada de Hispania, en tanto que ciudad más importante del Imperio.

Esta pieza también aparece en ... HISPANIA ROMANA (219 aC - 415dC) • TARRAGONA (CIUDAD)

La Iglesia establece sus demarcaciones territoriales, según la última división administrativa imperial.


La Iglesia establece sus demarcaciones territoriales, según la última división administrativa imperial. Las grandes sedes episcopales serán desde el principio Alejandría, Antioquía y Roma. (Luego se añadirá Constantinopla). Todas ellas salvo Constantinopla, exhiben su origen apostólico como raíz de la preeminencia que exigen. No cabe duda de que en alguna medida la rivalidad entre las grandes sedes se mezclará en estos siglos con las disputas teológicas, siendo a veces muy difícil distinguir cuáles son los profundos motivos de enfrentamiento que se vivirán en los sínodos regionales y en los concilios. Poco a poco se va fijando también la doctrina del lugar especial que ocupan en la Iglesia la diócesis de Roma y su obispo como cabeza visible del episcopado universal, es decir, se va definiendo la doctrina sobre el primado pontificio. El obispo de Roma no asiste personalmente a los primeros concilios, pero envía a su legados y exige que sean escuchados y tenidas en cuenta sus opiniones como opinión del obispo de Roma.

Los favorables a Donato y los favorables a Cecilio apelan a CONSTANTINO que se inclina por Cecilio.


Los favorables a DONATO y los favorables a CECILIO apelan a CONSTANTINO, ahora protector de la Iglesia. Después de muchas investigaciones y de demostrar considerable vacilación, el emperador se inclina por CECILIO. A los ojos de los donatistas, esta actitud coronará el síndrome persecutorio. Ahora ven con horror la alianza de la Iglesia con el Estado de CONSTANTINO.

Esta pieza también aparece en ... ROMA (IMPERIO) (27 aC - 395 dC)

El “donatismo” y los donatistas condenados por el Concilio de Letrán de 313.


Al fallecer en breve el obispo Mayorino de Cartago, la sucesión recae sobre DONATO que elabora el “donatismo”. Pero DONATO y los donatistas o seguidores de dicho cisma, son condenados por el Concilio celebrado, en la fecha, en el palacio de Letrán (Roma) y promovido por CONSTANTINO. Si esta doctrina -el donatismo- prosperara, el cristianismo quedaría reducido a una secta de unos cuantos “puros” y nadie podría estar seguro de poder asistir al santo Sacrificio de la Misa y de recibir la Sagrada Comunión.

EUSEBIO siendo sólo un catecúmeno, es designado obispo de Cesarea


EUSEBIO siendo sólo un catecúmeno, es designado, en la fecha, obispo de Cesarea. EUSEBIO es entronizado por los militares, lo mismo que lo serán Martín de Tours y Filasterio de Brescia. GREGORIO Nacianceno afirmará que en el siglo IV era usual elegir a los obispos “en las filas del Ejército, la Marina, el arado, la forja”. JERÓNIMO se quejará: «Uno que fue ayer catecúmeno, hoy es obispo; otro pasa de la noche a la mañana del anfiteatro a la Iglesia; un hombre que pasó la noche en el circo aparece la mañana siguiente frente al altar y otro que hace poco era protector de la escena es ahora consagrador de vírgenes.»

El emperador romano se considera como el «igual de los apóstoles» o el «obispo de fuera».


CONSTANTINO -emperador romano de Occidente- se considera como el «igual de los apóstoles» o el «obispo de fuera». Esto explica sus intervenciones. Para la mayoría de los cristianos, este cambio después de las persecuciones resultaba algo inaudito, inesperado. Los cristianos aceptan ahora el carácter sagrado del emperador, al que consideran bastante naturalmente como jefe del pueblo cristiano: nuevo Moisés, nuevo David. Bajo este título convoca los concilios. Los cristianos le agradecen sus favores. Les concede edificios oficiales (basílicas) y palacios para un uso religioso. Hace construir hermosos lugares de culto, las basílicas de San Pedro del Vaticano, la de Belén, todas las iglesias de Constantinopla, etc. Hace importantes donaciones a los obispos. Las comunidades cristianas pueden recibir legados. La Iglesia logra conseguir así un enorme patrimonio. El clero obtiene privilegios jurídicos. Los tribunales episcopales tienen jurisdicción civil, y los obispos son considerados del mismo rango que los gobernadores.

La discusión entre Cecilio y Donato se extiende por toda el África romana.


La discusión entre Cecilio y DONATO ambos contrincantes para ocupar la sede de Cartago, se extiende por toda el África romana. En muchas ciudades se oponen dos obispos rivales. Los donatistas, ya en oposición directa con el emperador, se hacen intérpretes de sentimientos populares y de aspiraciones sociales contrarias a la autoridad constituida. En su afán de arrollarlo todo echan mano de ciertas bandas de ascéticos fanáticos, llamados “circumceliones” (que van de casa en casa), les inyectan su propio fanatismo y les incitan a realizar actos de agitación y violencia, seduciendo y amedrentando a los fieles. (Estas bandas sobrevivirán hasta el siglo V). CONSTANTINO hará que sus tropas desalojen a los donatistas de las iglesias que ocupan. Pero como la paz no llega, el emperador concederá la libertad de culto a todos y dará dinero sólo a los católicos para reconstruir otras iglesias.