Esta vez, a diferencia de lo ocurrido con Nerón, el Senado sabe manejar la situación: en una sola sesión extraordinaria, la asamblea elige a un emperador de transición, el respetable NERVA (96-98), un senador anciano (setenta años) y sin hijos. Este se apresura a adoptar como heredero y sucesor a Trajano, el mejor general de Roma, ganándose así el apoyo del ejército. NERVA es admirado por su reputación de senador indulgente e intachablEs el primero de los cinco “buenos emperadores” que tratarán de gobernar con humanidad y evitar el comportamiento arbitrario. Pero el breve reinado de NERVA será inseguro y turbulento y provocará una seria crisis que no desembocará en una guerra civil quizá por la adopción del hispano Marco Ulpio TRAJANO, comandante de los ejércitos de la Germanía superior. A partir de este emperador -incluido- el “principio dinástico” es sustituido por el “principio adoptivo” (elección del mejor) que efectuaba cada emperador. Fin de los Flavios y comienzo de los Antoninos.

Muere el emperador del Imperio Romano, NERVA.