Japón depende mucho de los barcos mercantes para explotar sus nuevos territorios. Pero a partir de 1942, las pérdidas de barcos aumenta mucho. Los submarinos aliados y los ataques aéreos hunden decenas de miles de toneladas. A finales de 1944, Japón habrá perdido el dominio de los mares y la mayoría de sus barcos mercantes.

En el Pacífico, los británicos se ven obligados a retroceder. A fines de enero tienen que replegarse en Singapur, en el extremo meridional de la península de Malaya. Una vez allí, los británicos se encuentran en una posición muy semejante a la de los franceses en la línea Magínot. Los cañones de Singapur están emplazados únicamente para repeler un ataque por mar, y no pueden usarse contra un avance por retaguardia, desde la jungla. El 15 de febrero de 1942, la gran base británica de Singapur ha de rendirse sin condiciones. Los británicos pierden casi 140.000 hombres, la mayor parte de ellos prisioneros. Fue la derrota más humillante de la guerra.

El éxito de sus operaciones en Nueva Guinea y Guadalcanal impulsa a los aliados a preparar una nueva fase, que será un avance hacia Rabaul. Operación Cartwheel (Operación «Rueda de carro») (De marzo de 1942 a noviembre de 1943). Los japoneses se dan cuenta del peligro que corren en Nueva Guinea y se esfuerzan en reforzar su posición. Desde Rabaul, envían a la 51ª División; pero el 1 de marzo su convoy es localizado por aviones de reconocimiento de los americanos (Batalla del mar de las Bismarck). De toda la División, sólo llegan 100 soldados japoneses a Nueva Guinea. Los aliados al fin, tomarán Bougainville, que podrá usarse como base para ataques aéreos contra el puesto avanzado japonés de Rabaul.

Mientras prosiguen las operaciones en Filipinas y Birmania, la marina japonesa desembarca tropas en varias islas de las Indias Orientales Holandesas. La caída de Singapur hace imposible la defensa de ese archipiélago, y el 9 de marzo de 1942 la colonia holandesa se halla en manos japonesas. Al tiempo que se desarrollan estos hechos, la flota holandesa es destruida.

Los Estados Unidos, ávidos de alguna acción ofensiva, realizan una espectacular hazaña. El 18 de abril de 1942, con la guerra del Pacífico en su punto más bajo, 16 aviones B-25 al mando de James Harold Doolittle despegan del portaaviones Hornet y vuelan 800 millas hasta el Japón, donde bombardean Tokio y otras ciudades. Todos los aparatos tienen que aterrizar en China (y uno en Vladivostok), o bien se estrellan en suelo nipón. No causan muchos destrozos, pero animan a los norteamericanos y alarman a los japoneses. El hecho tiene un efecto psicológico más importante que el destructor, al verse los japoneses atacados en su propia casa.

Los japoneses toman Birmania, de alto valor estratégico por estar considerada una cuña entre India y China. El Imperio británico se alarma y traslada fuerzas a la India.

Tras el bombardeo de Tokio, Japón considera que ningún portaaviones norteamericano se debe acercar tanto a su archipiélago como para que éste resulte bombardeado, y deciden ampliar el perímetro de su control. Así, pues, tratan de establecerse en Nueva Guinea y en las islas Salomón, que se hallan bajo soberanía conjunta británica y australiana. Para conseguirlo, se aventuran al mar del Coral, que se extiende entre el noreste de Australia y las Salomón, y allí se encuentran con una flota norteamericana. Los días 7 y 8 de mayo de 1942 se desarrolla la batalla del mar del Coral.

Del 4 al 7 de junio de 1942 se desarrolla la batalla naval de Midway que pondrá fin a la escalada japonesa en el Pacífico. Al principio, los acontecimientos favorecen a los japoneses. Sus aviones son más maniobrables que los norteamericanos basados en tierra, y las pérdidas estadounidenses son considerables. Pero entonces los aparatos de los portaaviones (cuya existencia desconocen los japoneses) van al encuentro de la flota japonesa y destruyen sus portaaviones uno tras otro. Pierden, en efecto, los cuatro de que disponen, mientras que los norteamericanos pierden uno de los tres que tienen.

La ocupación por los japoneses de las islas Aleutianas parece indicar que pueden ser un factor importante en la guerra. Cuando el reconocimiento aéreo detecta que Attu y Kiska han sido ocupadas por los japoneses, los jefes de Estado Mayor se sienten muy preocupados. Parece como si los japoneses intenten emplear las islas para amenazar Alaska, o tal vez Siberia. Pero hasta 1943 no habrán fuerzas disponibles para recuperar Attu y Kiska. En mayo de 1943, las dos islas quedarán recuperadas.

La Batalla de Guadalcanal fue una de las batallas más importantes de la Segunda Guerra Mundial (12 al 15 de noviembre de 1942). En la primera ofensiva estadounidense en la Guerra del Pacífico, la marina aliada y 16.000 soldados de Estados Unidos se instalan el 7 de agosto de 1942 en la isla de Guadalcanal, entonces ocupada por el imperio del Japón. El nombre en clave de la operación fue Watchtower (‘Atalaya’). También fueron asaltadas simultáneamente las islas Florida, Tulagi, Gavutu y Tanambogo. Unas 30.000 personas murieron en Guadalcanal (24.000 japoneses y unos 6.000 aliados). No todos los muertos fueron de heridas de guerra: muchos de ellos murieron debido a la malaria y otras enfermedades tropicales. En este sentido, las tropas aliadas contaron con la ayuda de un mejor equipo médico.