A consecuencia de la intensificación del conflicto armado y especialmente a causa de la estrategia de tierra arrasada que el ejército realiza a partir de 1981, son destruidas centenares de poblaciones rurales y sus habitantes forzados a huir hacia los campamentos de desplazados en Honduras y otros países de la región. Se calcula que no menos de medio millón de personas son desplazadas de sus lugares de origen. La dinámica de la confrontación permeó toda la sociedad. En las ciudades se desarrollan, entre tanto, importantes organizaciones sociales, sindicales y comunales que acompañan durante toda la guerra los esfuerzos por encontrar una salida política negociada al conflicto armado, en este período se fundan la Unidad Nacional de los Trabajadores Salvadoreños (UNTS) y el Comité Permanente del Debate Nacional por la Paz (CPDN). Estas organizaciones sufrirán persecución sistemática por parte de la Fuerza Armada, cuerpos de seguridad y de las instancias clandestinas del Estado.

Entre 1984 y 1990, tienen lugar diversas rondas de conversaciones entre el gobierno y la guerrilla.

Se intensifican los ataques de la guerrilla, que son respondidos con similar contundencia por los escuadrones de la muerte.

Tras largos años (desde 1980) de sangrienta guerra civil en El Salvador, en 1984 los rebeldes de izquierdas se declaran dispuestos a iniciar las primeras conversaciones de paz.

Es nombrado nuevamente presidente de El Salvador, el democristiano Ing. José Napoleón Duarte (1984-1989). Duarte vuelve a recuperar la presidencia en medio de un país sumido en el caos económico y con una quinta parte de su territorio controlada por la guerrilla del Frente Democrático Revoclucionario -Frente Farabundo Martí de Liberaciópn Nacional (FDR-FMLN).

En los meses precedentes al golpe de Estado que derrocaría al general Carlos Humberto Romero y colocaría en su lugar una junta cívico-militar se produjeron graves disturbios en la capital salvadoreña.

Los sucesos comenzaron cuando el l0 de mayo de 1984 un grupo de manifestantes izquierdistas pertenecientes al Bloque Popular Revolucionario (BPR) ocuparon la catedral y varias embajadas; concretamente la de Costa Rica y la de Francia. La policía, ayudada por unidades de la Guardia nacional, abrió fuego contra los manifestantes, que estaban terminando de celebrar un mitin, causando veinticinco muerto y numerosos heridos. Las versiones de los hechos difieren, según la procedencia de las mismas: -La policía afirma que fueron los militantes del BPR, que, apostados en el templo, quienes comenzaron el tiroteo. -Sin embargo, la declaración de testigos presenciales es completamente opuestas, para quienes fue la Guardia Nacional la que abrió fuego, sin previo aviso, haciendo que los manifestantes huyesen y se refugiasen en la catedral. Allí comenzó la autentica masacre. Al mismo tiempo continuaba la ocupación de las embajadas antes mencionadas.

La situación se agravó durante todo el mes de mayo, llegando a su culmen el 24 de ese mismo mes, cuando son asesinados 14 militantes del BPR, que intentaban acercarse a la embajada de Venezuela, que había sido asaltada varios días antes por miembros de su partido. Asimismo fue asesinado el ministro de educación Antonio Herrera Rebollo, cuando se dirigía al centro de gobierno, en San Salvador. A la vista de la situación el gobierno venezolano decidió repatriar a todos sus compatriotas que se hallaban en San Saldor.

Histórica entrevista entre el presidente salvadoreño y los principales dirigentes de la más importante fuerza de la oposición, el Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional. La entrevista puede llevarse a cabo gracias a la intervención del presidente de Colombia Belisario Betencourt; aunque como mediador entre ambas partes actúa monseñor Arturo Rivera y Damas, sucesor del fallecido monseñor Romero al cargo del arzobispado de San Salvador. En esas primeras conversaciones no hay ningún acuerdo sobre el alto el fuego definitivo, pero la satisfacción es la tónica general, ambas partes coinciden en que ha habido aspectos positivos.

Primera ronda de conversaciones del gobierno de José Napoleón Duarte con la guerrilla. Tuvo lugar en La Palma, el día 15 de Octubre. Se reanudarán en Aguyamalo a fines del mes de Noviembre de ese mismo año.