Francesco Todeschini Piccolomini es coronado papa con el nombre de PÍO III (8.10.1503 – 18.10.1503) ini). Es sobrino del papa Pío II, quien lo toma bajo su protección cuando aún era obispo de Siena, lo que le permite estudiar Derecho en Perugia. La elección de su tío como Papa, le supone ser nombrado arzobispo de Siena en 1460 y posteriormente cardenal diácono de San Eustaquio. El cónclave reunido para elegir al pontífice que ha de suceder e Alejandro VI, está dividido entre dos candidatos: el cardenal Georges d’Amboise, apoyado además por César Borgia, y el cardenal Giuliano Della Rovere, el futuro Julio II. Para evitar que las discusiones se prolonguen se decide un candidato de compromiso que resulta ser Francesco Todeschini quien adoptó el nombre de Pío III en honor a su tío.

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CÉSAR Borgia se presenta ante el cardenal Casanova, depositario de la Cámara pontificia, exigiendo la entrega de todos los bienes su difunto padre, pero no lo consigue debido a la actitud decidida del sucesor de Alejandro, el papa PÍO III. PÍO III, enfermo de gota y, aunque contaba sesenta y cuatro años, prematuramente envejecido por la ajetreada vida que como legado pontificio ha llevado al servicio de varios papas, se dedica inmediatamente a reformar la Iglesia haciendo apresar y encarcelar, como una de sus primeras medidas, a CÉSAR Borgia.

El papa PÍO III muere tres semanas después. Su muerte, el 18 de octubre de 1503, veintiséis días después de su elección, impide que continúe sus reformas. El motivo oficial de su muerte es la ulceración de una pierna, pero existe otra versión de la misma que sostiene que ha sido envenenado por Pandolfo Petrucci, el gobernador de Siena. Las profecías de San Malaquías se refieren a este papa como De parvo homine (‘Del hombre pequeño’), cita que hace referencia a su apellido, Piccolomini (piccolo significa ‘pequeño’, y uomini significa ‘hombres’).