Fallece, tras larga y penosa enfermedad, en la ciudad de Ginebra, el reformador JUAN CALVINO. Habiendo sido bien aceptado en Ginebra, por su talento y su integridad moral, junto con su esposa Idelette de Bure fue hasta el día de su muerte el dueño absoluto de vidas, haciendas, conciencias y destinos de una multitud fervorosa y adicta. No dejó nunca de escribir y de predicar, rumiando sin descanso sus peregrinas ideas sobre la Predestinación. Fanático en la defensa de sus dogmas y su personal inclinación al ascetismo, hizo que, bajo su influencia, Ginebra fuera como una lóbrega prisión, sin el menor resquicio para la esperanza ni para la alegría.
Esta pieza también aparece en ... HISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA. De Concilio de Trento a Pío X (1545 - 1903) • PROTESTANTISMO (1517- ……….) • SUIZA