En la plaza de Whitehall (Londres), delante de su palacio, es decapitado el rey CARLOS I Estuardo.


En la plaza de Whitehall (Londres), delante de su palacio, es decapitado -en la fecha- el rey CARLOS I Estuardo, pese a los esfuerzos de los representantes diplomáticos de varios Estados europeos para lograr que CROMWELL le respete la vida. El que ha sido rey de Inglaterra, sube al cadalso con gran dignidad. Por primera vez en la historia del mundo, una rebelión de sus súbditos había costado la cabeza a un rey. CROMWELL se revelará como político y gran estadista. El gobierno de CROMWELL en Inglaterra es una tiranía, pero sus grandes cualidades militares y políticas dan a Inglaterra un altísimo prestigio. (De hecho en Inglaterra el pueblo se enorgullece de haber domeñado la cerviz del absolutismo regio. Pero en las escuelas, cuando se pone un ejercicio de redacción sobre la guerra civil, CARLOS I nunca pierde la cabeza). La ejecución pública de CARLOS I Estuardo, a la que se quiere dar una significado de ejemplaridad, apenas despierta sentimientos destacables entre la población. Europa quedó horrorizada. CARLOS será enterrado en privado la noche del 7 de febrero de 1649, en la cámara acorazada de Enrique VIII en la capilla de St. George en el castillo de Windsor. Poco días después se declarará la República.