Se nombra a GERBERTO de Aurillac (futuro Papa Silvestre II), abad del monasterio de Bobbio, pero pronto regresa a Reims donde, como consejero del arzobispo Adalberón, favorecerá el acceso de HUGO Capeto al trono de Francia.
Se nombra a GERBERTO de Aurillac (futuro Papa Silvestre II), abad del monasterio de Bobbio, pero pronto regresa a Reims donde, como consejero del arzobispo Adalberón, favorecerá el acceso de HUGO Capeto al trono de Francia.