Gran Bretaña, Francia y España deciden cobrarse la deuda de México por la fuerza.

JUÁREZ, declarado presidente constitucional en enero de 1861, trata de establecer un gobierno liberal y democrático, pero los anteriores mandatarios mexicanos han conseguido dejar exhausta la hacienda pública, de tal manera que el país no puede hacer frente al pago de los préstamos europeos que se han ido acumulando. JUÁREZ suspende dichos pagos por dos años: no tiene elección. Gran Bretaña, Francia y España deciden cobrarse su deuda por la fuerza, enviando una expedición que , en la fecha, desembarca tropas en Veracruz. Los EEUU., que vacilaron en atacar México quince años antes, no desean que alguien haga ahora lo mismo, pero estando empeñados en una guerra civil, nada pueden hacer. Los británicos y los españoles se retiran en seguida, pues consideran que la liquidación de la deuda no compensa verse enredados en el atolladero mexicano. Pero NAPOLEÓN III posee un don especial que le impulsa a cometer errores, y opta por quedarse y constituir un «Imperio Mexicano» manejado por Francia. Resulta un error muy costoso. Debilita de tal manera a Francia, que ridiculiza a su emperador ante el mundo. Y también le vale la enemistad de los EEUU.