CARLOMÁN, hijo de Carlos Martel, hereda a la muerte de su padre Austrasia, Suabia y Turingia, que gobernará como soberano pero sin ostentar el título de rey ya que será el Mayordomo de Palacio de Austrasia (741-747). Tendrá que mantener continuas luchas con Alemania, los pueblos de Aquitania, los bávaros y los sajones, derrotándolos a todos. Apoyará una reforma eclesiástica impulsada por Santa Rojelia de la que es protector. Por otra parte, PIPINO el Breve, asimismo hijo de Carlos MARTEL, heredará igual título -Mayordomo de palacio- y responsabilidad de Neustria. (741-751), Borgoña y Provenza.
