PIPINO III el Breve (Mayordomo de palacio 741-751 y Rey de los francos 751-768)

Total de piezas: 18

PIPINO III de los Francos, más conocido como PIPINO el BREVE, nace en Jupille (cerca de Lieja, Bélgica).


PIPINO III de los Francos, más conocido como PIPINO el Breve, nace hacia el 715 en Jupille (cerca de Lieja, Bélgica, de donde arranca una gran parte de la dinastía Merovingia y Carolingia). Hijo menor de Carlos MARTEL.

Carlomán, hijo de Carlos Martel, hereda a la muerte de su padre Austrasia, Suabia y Turingia.


CARLOMÁN, hijo de Carlos Martel, hereda a la muerte de su padre Austrasia, Suabia y Turingia, que gobernará como soberano pero sin ostentar el título de rey ya que será el Mayordomo de Palacio de Austrasia (741-747). Tendrá que mantener continuas luchas con Alemania, los pueblos de Aquitania, los bávaros y los sajones, derrotándolos a todos. Apoyará una reforma eclesiástica impulsada por Santa Rojelia de la que es protector. Por otra parte, PIPINO el Breve, asimismo hijo de Carlos MARTEL, heredará igual título -Mayordomo de palacio- y responsabilidad de Neustria. (741-751), Borgoña y Provenza.

Childerico III, último rey franco de la dinastía Merovingia, es ascendido al trono de Austrasia y Neustria.


CHILPERICO III, rey franco de la dinastía Merovingia (743-751), es ascendido al trono de Austrasia y Neustria por el mayordomo de palacio PIPINO el Breve. Es el último rey franco de la dinastía Merovingia.

PIPINO el Breve (Mayordomo de Neustria) pacifica a los alamanes


PIPINO el Breve (Mayordomo de Neustria) pacifica a los alamanes.

Esta pieza también aparece en ... ALAMANES  • REINO FRANCO CAROLINGIOS (751-911)

CARLOMÁN se retira a la abadía de Montecassino dejando en manos de PIPINO el Breve sus posesiones.


Tras múltiples combates librados, CARLOMÁN, hijo de Carlos Martel, renuncia al poder para hacerse religioso. Se entrevista con el Papa ZACARÍAS para solicitar la clericatura y se retira en la abadía de Montecassino en 747, dejando en manos de su hermano, PIPINO III el Breve, todas sus posesiones. PIPINO el Breve, pues, pasará a ser el único Mayordomo de palacio de los francos (747-751) En 753, Carlomán será enviado a Italia con una misión de paz, y morirá en Marruecos en 754. Será enterrado en Viena.

La reforma de la Iglesia franca continúa con PIPINO.


La reforma de la Iglesia franca continúa con PIPINO. Él, personalmente, será menos intervencionista que su padre Carlos MARTEL y no interferirá en el nombramiento de obispos, aunque sí participará en la reorganización de muchos obispados. Romanizará la liturgia galicana, establecerá el diezmo para mantenimiento de la Iglesia, dará una regla de vida, que luego será copiada en otros lugares, a los canónigos de la catedral de Metz, y, en general, a través de los concilios francos, no dejará nunca de colaborar en la nueva estructura eclesiástica.

PIPINO III el Breve, hijo de Carlos Martel, es ungido rey de los francos por S. Bonifacio.


Los carolingios quieren beneficiarse del declive de los merovingios. Ocupando el puesto hereditario de mayordomo de palacio, un cargo similar al de primer ministro, han asumido cada vez más competencias en el gobierno cotidiano del reino de los francos. PIPINO el Breve, hijo de Carlos Martel, mayordomo de palacio, está ya en posesión de buena parte del poder ejercido por los reyes y por ello se propone alcanzar el título de soberano. Considera que quien realiza las tareas de gobierno en vez del rey (o sea, quien tiene el poder) debe convertirse también en monarca (ya que éste sólo tiene el nombre). El papa ZACARÍAS que es consultado al respecto le da la razón. Así, pues, PIPINO decide deponer al débil rey CHILPERICO III de Austrasia y de Neustria (último soberano merovingio) y encerrarlo en un convento. En la fecha, tras ser proclamado rey por los grandes señores francos, PIPINO III (751-768) es ungido por S.BONIFACIO.

El Papa ESTEBAN y PIPINO III el Breve se entrevistan para tratar sobre la amenaza de los lombardos que han conquistado Rávena.


A pesar del acuerdo de paz -por veinte años- firmado en 741 entre el papa ZACARÍAS y el rey de los lombardos Liutprando, ASTOLFO, actual rey de los lombardos, ha violado el acuerdo conquistando Rávena. Amenazado en Roma por los lombardos, el papa ESTEBAN, que ya no puede contar con la ayuda del emperador de Constantinopla, acaba por buscar refugio junto a PIPINO. En la fecha, ESTEBAN y PIPINO se encuentran en Ponthion, al sur de Chalons-en-Champagne, al nordeste de la actual Francia, donde ESTEBAN es objeto de una calurosa acogida. Al día siguiente tiene lugar la procesión penitencial y la postración del papa y de su entorno, tras de lo cual ESTEBAN recibe enseguida una respuesta del rey que excede con mucho sus más optimistas expectativas. Ambos personajes siguen durante varios meses celebrando una serie de encuentros que culminarán con el que tendrá lugar en Pascua cerca de Laon.

PIPINO vence a los lombardos y entrega la región de Rávena al Papado. «Donación de Pipino». Aparece el Estado Pontificio.


PIPINO promete ayudar al papa ESTEBAN y al pueblo de Roma y sabrá cumplir perfectamente su promesa. Pero PIPINO va más allá y garantiza por escrito a la sede de San Pedro la posesión legítima del ducado de Roma, la posesión de Rávena y el territorio del antiguo exarcado así como también otros extensos territorios al norte y al este del ducado que estaban en poder de los lombardos y que se extendían hasta el exarcado. Esta garantía, conocida como la «Donación de Pipino» constituye el origen y el fundamento de los Estados Pontificios. Desde este momento queda reconocido jurídicamente el Estado Pontificio. La nueva dinastía -posteriormente denominada Carolingia por su miembro más destacado, CARLOMAGNO (768-814)- se consolida con esta alianza. Pipino trata de negociar con ASTOLFO la entrega de los territorios que ha prometido al papa; pero, como cabía esperar, ASTOLFO se niega a ello.

ESTEBAN unge a PIPINO, a su esposa y a sus hijos y les concede el título de «Patricio de los romanos»


A cambio de la ayuda de los francos contra los lombardos, el papa ESTEBAN II (III) aprueba la pretensión al trono de los carolingios y, en la fecha, unge (consagra) a PIPINO y a sus hijos CARLOS y CARLOMÁN con los óleos sagrados, al igual que los profetas ungieron a los reyes bíblicos de Israel. Con este gesto, el Papa pone sobre la dinastía de los carolingios el sello final de aprobación y proclama ante todo el mundo su legitimidad a los ojos de la Iglesia y de Dios quedando por consiguiente, situados en un plano superior al de los laicos. Además, concede al rey y a sus hijos el nobilísimo título de «patricio de los romanos», un título que anteriormente ha sido exclusivo del exarca, con lo que viene a significarse que la protección temporal del obispo de Roma pasa de aquél -es decir del Imperio bizantino- a los reyes francos. Queda instaurado el poder de los carolingios. A partir de PIPINO, los reyes pretenderán recibir su dignidad de Dios y actuar según el derecho divino.