CONSTANTINO reunifica el Imperio de Oriente y el de Occidente y se proclama, en Roma, único emperador. Dirige el gobierno central, en compañía de un consejo asesor, conocido como el sacrum consistorium. El Senado recupera sus poderes, los cuales había perdido en el siglo III, y comienza a emitir el sueldo (solidus) de oro, que se convertirá en la moneda de uso. Por otra parte, Constantino comienza a referirse a sí mismo como el «obispo común» (koinos episkopos), una especie de súper-obispo cuya función consiste en asegurar el orden y la ortodoxia en la Iglesia y hacer todo lo necesario para posibilitar el funcionamiento y el florecimiento de la Iglesia. El término significa que su influencia se extiende a todos los obispos que, incluido el de Roma, muestran su deferencia para con él sin hacer preguntas. Él, a su vez, respeta la autoridad de los obispos y comprende que tienen una esfera propiamente suya, pero no deja de tomar la iniciativa en casos particulares. La Iglesia comienza a funcionar dentro del sistema romano, pero no es absorbida por él.
CAUSAS DEL CISMA DE ORIENTE.
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CONSTANTINO ha convertido Bizancio, en Constantinopla, la “Nueva Roma”.
Bizancio la capital del imperio reunificado de Oriente y Occidente, se ha convertido en nueva Roma y posteriormente en Constantinopla (hoy Estambul) en honor de su fundador. Su reconstrucción desde 324 ha durado hasta el 330. En la fecha, se celebra la ceremonia que ratifica la creación de la ciudad de Constantino: Constantinópolis (Constantinopla).
Se cumplen todas las condiciones para que el cristianismo se convierta en religión del Estado.
Los emperadores romanos van considerando poco a poco a la Iglesia como un organismo más del Estado, entrometiéndose en todos sus asuntos. De hecho, cuando CONSTANTINO I el Grande muere se puede decir con toda razón que se han conseguido todas las condiciones para que el cristianismo se convierta en religión del Estado. Pero en esta política de favor hacia la religión cristiana se insinúa un peligro: la inclinación del emperador a intervenir, más allá de la propia competencia, en las cuestiones eclesiásticas y teológicas. Nace de esta manera el “césaro-papismo” que tan pesadamente dejará sentir sus consecuencias en la historia de la Iglesia, por obra de los emperadores siguientes.
El concilio es aceptado en Occidente salvo su canon tercero.
El Concilio I de Constantinopla es aceptado en Occidente salvo su canon tercero. El papa, aunque complacido con la afirmación doctrinal del concilio, rechaza su canon tercero ya que incide de lleno en la relación entre Oriente y Occidente. El decreto da primacía de honor a Constantinopla, la «nueva Roma», como el principal obispado después del de Roma, dando a entender, además, que la primacía de Roma deriva del mismo status imperial que la de Constantinopla, no de sus orígenes apostólicos. Y es que en el Concilio de Nicea, la sede de Alejandría quedaba situada en el 2º rango (después de Roma) (Antioquía en el 3º y Jerusalén en el 4º) No obstante esta decisión, el presente Concilio de Constantinopla concede a esta capital el 2º rango (después de Roma), provocando lo que se conocerá como la “Humillación de Alejandría”.
A pesar de su equilibrada formulación, el Concilio Ecuménico de Calcedonia no trae la paz.
A pesar de su equilibrada formulación, el Concilio Ecuménico de Calcedonia no trae la paz. Y es que se toman algunas disposiciones disciplinarias con las que LEÓN I no está de acuerdo, Así, el canon 28 deja establecidas las cuatro circunscripciones orientales de Constantinopla, Antioquía, Jerusalén y Alejandría, a las que se añade la de Roma en Occidente. Estos son los cinco patriarcados que recibirán posteriormente -en 550- una existencia jurídica bajo Justiniano. A veces se hablará de “pentarquía” (gobierno de cinco). Constantinopla, tiene el mismo rango que Roma, lo que es inceptable por el papa LEÓN I, provocando el retraso de su adhesión a las decisiones finales del concilio. Posteriormente aceptará la postura doctrinal del concilio y se convertirá en uno de sus grandes valedores, pero seguirá rechazando el canon 28. Como es obvio, las reivindicaciones de la primacía de Roma, en los términos en que los papas han comenzado a formularla, siguen encontrando resistencia en Oriente.
JUSTINO I pone fin al “Cisma Acaciano” con Roma. La reunificación se formaliza el día de Pascua de 519.
JUSTINO I concierta la paz con el papa HORMISDAS y trata de poner fin al cisma con Roma (“Cisma Acaciano”), un objetivo compartido con el nuevo patriarca de Constantinopla, JUAN II. La reunificación se formaliza el día de Pascua, el 24 de marzo de 519. Este cisma se convierte en un ensayo de la separación definitiva que conocerá dos estadios más: el “Cisma de Focio” y el “Cisma definitivo de Miguel Cerulario”.
JUSTINIANO I quiere tomar parte en las decisiones religiosas por lo que persigue a los herejes.
La ortodoxia de JUSTINIANO le ha llevado a realizar numerosas persecuciones contra posiciones supuestamente heréticas, combinando estas persecuciones con una política de aproximación, demostrando una vez más los deseos de JUSTINIANO I de tomar parte en las decisiones religiosas. El resultado de esta misión espiritual es un rotundo fracaso, que abrirá aún más las brechas entre las iglesias de Oriente y Occidente.
BONIFACIO IV consigue el permiso para convertir el Panteón de Roma en una Iglesia Cristiana.
Durante su pontificado, BONIFACIO IV consigue, del emperador FOCAS, el permiso para convertir el Panteón de Roma, construido por Agripa en honor a Júpiter, Venus y Marte, en una Iglesia Cristiana que es consagrada, en la fecha, a la Virgen María y a todos los mártires con el nombre de Sancta María ad Martires. El diámetro de su cúpula sólo es superado por el de S. Pedro. Este fue el primer templo pagano transformado para el culto cristiano, y con ello, se restablecerán las relaciones Roma-Bizancio. Según cuenta la tradición, veintiocho grupos de huesos de mártires fueron trasladados de las Catacumbas y colocados bajo el altar mayor de esta iglesia.
El mismo año de la aparición de la ley -la Ekthesis- fallece el papa HONORIO y el patriarca SERGIO.
El mismo año de la aparición de la ley -la Ekthesis- fallece, en la fecha, el papa HONORIO I, dejando la solución del problema a sus sucesores. También en 638 muere SERGIO. Las disputas teológicas entre Roma y Constantinopla continuarán y empeorarán.
SERGIO I -papa-. Acercamiento de Roma a Oriente.
SERGIO I -papa- ( 15.12.687 – 8.9.701). Como ocurriera con su antecesor, SERGIO es elegido ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo entre el exarca y el clero. Durante el pontificado del papa SERGIO que era sirio, habrá un acercamiento de Roma a Oriente. De hecho, se instaurarán en el calendario litúrgico una serie de fiestas que tienen su origen en Oriente: la exaltación de la Santa Cruz (14 septiembre), y las cuatro grandes celebraciones de la Virgen María: Purificación (2 de febrero), Anunciación (25 de marzo), Asunción (15 de agosto) y Navidad (25 de diciembre). SERGIO I es quien, por otra parte, introduce el Agnus Dei en la misa.