Los magnates y obispos portugueses forman un partido en torno a ALFONSO ENRÍQUEZ, hijo de TERESA.


Los magnates y obispos portugueses, descontentos por la ascendencia que algunos nobles gallegos ejercen sobre doña TERESA y por la orientación que éstos n a la política del condado, forman un partido en torno a la figura de ALFONSO ENRÍQUEZ, hijo de doña TERESA, para evitar que tan perniciosa influenciaga peligrar sus anhelos de independencia. ALFONSO ENRÍQUEZ, disgustado por el alejamiento en que su madre le tiene de toda intervención en el gobierno, no tarda en rebelarse contra ella.