A la muerte de José I, le sucede su hija Dª. MARÍA I de Portugal, la Piadosa, (1777-1816) I. Está casada con su tío Pedro III -que toma el título de rey consorte- hijo de Juan V. MARÍA I da un giro a la situación: la nobleza más reaccionaria de Portugal pide la rehabilitación de la casa de Tavora, lo que se conseguirá en 1781. Las cárceles se abren y se da libertad a los inculpados en 1759. Pombal cae en desgracia y es desterrado, aunque no se puede impedir la difusión de las ideas revolucionarias, introducidas por los comerciantes extranjeros. En 1782, morirá ante la consternación de los personajes ilustrados de Europa.
MARÍA I (Reina de Portugal)
Total de piezas: 4
MARÍA I de Portugal da muestras de enajenación mental.
MARÍA I de Portugal es una reina amante de la paz, dedicada a las obras sociales. También concede asilo a diversos aristócratas franceses que huyen de la Revolución francesa (1789), aunque es una mujer melancólica, víctima del fervor religioso. El 1 de febrero de 1792, a la salida del teatro de Salvaterra, sufre un ataque de locura.
JUAN VI, hijo de MARÍA I de Portugal asume la regencia convirtiéndose efectivamente en rey.
MARÍA I de Portugal es declarada oficialmente loca e incapacitada para el gobierno el 10 de febrero de 1792. Consecuentemente, su hijo y heredero, JUAN VI, asume la regencia, convirtiéndose efectivamente en rey. La Revolución francesa está avanzando y Portugal toma drásticas medidas para reprimir el pensamiento revolucionario.
Fallece MARIA I, reina de Portugal.
Fallece MARIA I, reina de Portugal. JUAN, su hijo, ha elevado el Brasil al rango de reino, unido con Portugal bajo un mismo monarca, de modo que ahora, al morir su madre MARÍA, se convierte en JUAN VI, rey de Portugal y del Brasil (1816-1826). JUAN VI seguirá en el Brasil durante cinco años más. En este tiempo, se ve inmerso en la notable controversia entre los constitucionalistas, partidarios de una monarquía limitada, y los absolutistas, que propugnan una monarquía todopoderosa.