El 22 de marzo de 1765, los británicos aprueban una “ley del timbre” (“Stamp Act») por la que los colonos de Norteamérica deben adquirir unos timbres especiales y adherirlos a todos los documentos oficiales, periódicos, licencias y una variedad más de papeles. Los timbres cuestan dinero, claro está, que va a parar a las arcas del tesoro británico. Una tempestad de angustia se levanta en las colonias, y se organizan boicots a los artículos británicos, con tal efectividad que llevan la zozobra al mundo de los negocios.
GUERRA DE LA INDEPENDENCIA (EEUU. DE INGLATERRA) (1775-1783)
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En Norteamérica, la ley del timbre no resulta efectiva y los británicos la derogan. Buscan otras vías.
En Norteamérica, la ley del timbre no resulta efectiva y los británicos la derogan el 18 de marzo de 1766. Buscan entonces otras vías impositivas para las colonias, implantándolas de manera muy paulatina, no tanto para lograr de momento una recaudación, cuanto para mantener el principio de que ellos pueden sujetar al pago de impuestos a las colonias, si así lo desean. Y este principio es el que las colonias desean combatir.
Matanza de Boston. En 1770 un destacamento de soldados amenazado provoca tres personas muertas.
Los colonos británicos en América del Norte se niegan a aceptar las leyes fiscales de Townsend votadas por el Parlamento de Londres en 1767, en el que no tienen representantes. En el transcurso de un levantamiento, cinco habitantes de Boston, capital de Massachusetts; son muertos por las fuerzas inglesas. Este incidente llega a conocerse como la «Matanza de Boston» los soldados sometidos a un jurado serán absueltos y con esto se acentúa el descontento colonial. La tensión aumentará y dará paso finalmente a la guerra de Independencia estadounidense.
Los ciudadanos de Boston se visten de indios, asaltan los barcos ingleses y arrojan al agua las cajas de té.
Aunque en los últimos años, el Parlamento inglés ha retirado algunas leyes, ha seguido manteniendo la tasa sobre el té -más por cuestión de principios que por motivos económicos-. El Parlamento inglés quiere recordar de esa manera su derecho a dictar leyes y a recaudar impuestos, incluso en las colonias americanas. Cuando, a mediados de diciembre de 1773, tres navíos ingleses fondean en el puerto de Boston para desembarcar su cargamento de té, «Los Hijos de la libertad» llaman a la población a oponerse abiertamente. El 16 de diciembre, los ciudadanos de Boston se visten de indios, asaltan los barcos y arrojan al agua las cajas de té de las Indias que consideraban demasiado gravados. La acción pasa a la historia con el nombre de «Boston Tea Party». Londres responde con cinco decretos que arruinarán a Boston y reducirán las libertades de Massachusetts. Meses meses después se desencadenará la guerra de independencia norteamericana. (La estructura social dentro de las colonias indica la ubicación en la cúspide del poder de una oligarquía territorial conservadora. A su lado surge una amplia y próspera clase media dispuesta a defender la tolerancia, el libre desarrollo de sus propiedades y el comercio ante las exigencias de la Corona. Este último sector, se convierte en guía de la revolución promoviendo organizaciones secretas: «Los Hijos de la Libertad».)
Primer Congreso Continental que se reúne en Filadelfia en 1774.
Nace un sentimiento nacionalista en las colonias inglesas de Norteamérica que hace inevitable la ruptura al producirse el choque de intereses económicos entre americanos e ingleses, sobre todo por las tasas y restricciones comerciales impuestas por Londres que quiere gravar sobre las colonias el coste de las guerras de colonización. En septiembre de 1774 se reúnen por primera vez el Congreso de colonos americanos en contra de la servidumbre a los británicos y a favor de una patria independiente. Ya se discuten unas hipotéticas leyes. Pese al clima de enemistad contra los ingleses en las colonias, todavía hay algunos colonos que apoyan al rey inglés JORGE III, siendo llamados kings-friends. Pero los ánimos cambian cuando éste declara rebeldes a los colonos sin marcar ninguna diferencia. Muchos súbditos leales de Su Majestad se pasan entonces a los sublevados. WASHINGTON asiste como representante de Virginia en el Primer Congreso Continental que se reúne en Filadelfia en 1774 para defender una posición unitaria contra la metrópoli.
El parlamento británico prohibe todo comercio con las colonias americanas
El parlamento británico prohibe todo comercio con las colonias americanas
Los colonos americanos consiguen tomar un depósito de armas en Concord.
Por la ciudad de Boston se propagan inquietantes rumores. ¿Qué traman los marinos en el puerto, cerca de dos buques de guerra? ¿De qué hablan, en voz baja, los oficiales del ejército? En este clima de tensión y desconfianza, un herrero de la ciudad, Paul Revere, recibe una noticia preocupante. Un muchacho le cuenta que ha escuchado a un militar inglés decir a sus colegas que se va a «armar la gorda». Gracias a esta y otras informaciones, el herrero ata cabos. El ejército regular británico se está preparando para apoderarse de Lexington y aplastar la incipiente rebelión contra Gran Bretaña. No hay tiempo que perder. Revere ensilla un caballo y parte a dar la voz de alarma. Por el camino se detiene en varias ciudades, habla con los líderes patriotas. Ellos, a su vez, envían a otros mensajeros. En pocas horas, mientras la noticia se expande por toda la región, surge un decidido movimiento de resistencia. Los colonos consiguen tomar un depósito de armas en Concord.
Cuando los británicos atacan el día 19, las milicias locales les derrotan estrepitosamente en Concord.
Comienza la guerra de la Independencia de las trece colonias británicas en América: batalla (en realidad, escaramuza) de Lexington, al noroeste de Boston. Se confía a George Washington el mando del ejército. Cuando los británicos atacan el día 19, las milicias locales les derrotan estrepitosamente en Concord. La Revolución Norteamericana ha comenzado. Ya no hay marcha atrás. (Durante la guerra, Francia ayudará a los revolucionarios americanos con tropas bajo el mando del Marqués de La Fayette, mientras que España, lo hará de forma discreta desde el principio gracias a Bernardo de Gálvez y de forma abierta a partir de la batalla de Saratoga (1777), mediante armas, suministros y abriendo un frente en el flanco sur. La subida de los impuestos no se hace esperar. Cuando la ley del Timbre grava libros, prensa y documentos jurídicos, muchos se sienten ofendidos. La cuestión no es tanto el dinero, que también, como el hecho de que las autoridades impongan una nueva carga sin el consentimiento de los ciudadanos. Todo se complica cuando Inglaterra establece un ejército permanente en las colonias, destinado tanto a defenderlas contra una posible agresión de los franceses o los indios como a luchar contra el contrabando y el bandolerismo. Mantener estas tropas origina nuevos y cuantiosos gastos que, a su vez, requieren nuevas tasas para sufragarlos.
En la fecha, se reúne en Norteamérica el Segundo Congreso Continental.
En la fecha, se reúne en Norteamérica el Segundo Congreso Continental. Éste forma un gobierno provisional y se nombra a George Washington comandante supremo del Ejército Continental que habrá de apoyar a las 13 colonias que se han declarado independientes. Aunque no es un independentista radical, parece apropiado para el cargo por su experiencia militar, por su buena reputación entre los notables del Sur (pues hasta este momento el conflicto con la metrópoli ha afectado fundamentalmente a las colonias de Nueva Inglaterra, en el Norte) y por su demostrada capacidad de gestión, que le ha llevado a ser uno de los plantadores más ricos del país. Aunque reticente a dejar su hogar en Virginia, Washington acepta el comando, declarando «con gran sinceridad, no creo estar al nivel de un Comandante, estoy honrado». Asimismo solicita que no se le pague excepto el reembolso de sus gastos. Se empiezan a reclutar de inmediato, soldados de entre todas las partes de las colonias.
Dentro de la guerra de Independencia estadounidense, durante el sitio impuesto a Boston, los ingleses desalojan la colina de Bunker Hill.
Dentro de la guerra de Independencia estadounidense, durante el sitio impuesto a Boston, los ingleses, comandados por el general Howe, consiguen, a costa de grandes pérdidas, desalojar la colina de Bunker Hill (cercano al actual Breed’s Hill), contribuyendo con todo a elevar la moral de los sublevados, que habían sufrido menos pérdidas que sus adversarios.