ALEJANDRO VII (Papa)(1655-1667)

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ALEJANDRO VII -papa- (1655-1667).


Fabio Chigi, candidato preferido de España, es coronado papa bajo el nombre de ALEJANDRO VII (18.4.1655-22.5.1667) después de 80 días de cónclave. Nacido en Italia, alcanza el solio pontificio a la muerte de Inocencio X, no sin controversias. El cónclave papal se divide nuevamente entre los partidarios de los Habsburgo y la facción francesa, como ha ocurrido en la elección del papa anterior, Inocencio X. El candidato francés, Sachetti, es derrotado.

Se hace pública la conversión al catolicismo de Cristina de Suecia.


Se hace pública la conversión al catolicismo de Cristina de Suecia. Durante el papado de ALEJANDRO VII, Cristina de Suecia, hija de Gustavo Adolfo, arriba a Roma para fijar su residencia y renunciando por ello al trono. Su constante inmiscusión en asuntos vaticanos será motivo de no pocos roces con el Papa.

Incapaz de centrar su atención en los asuntos de estado, ALEJANDRO VII se vuelca en la literatura y la filosofía.


Incapaz de centrar su atención en los asuntos de estado, ALEJANDRO VII se vuelca en la literatura y la filosofía siendo el autor de una colección de poemas en latín que es publicada, en 1656, en París bajo el título de Philomathi Labores Juveniles. Fomentará asimismo la arquitectura y el embellecimiento general de Roma, donde se derribarán casas para realizar un nuevo trazado de las calles romanas, convirtiéndose además en un gran mecenas, especialmente de Bernini, a quien encargará la construcción de la bella columnata de la plaza de la Basílica de San Pedro y confiará obras como la ornamentación de la iglesia de Santa María del Popolo, iglesias de varios de los cardenales Chigi, la Scala Regia, la Silla de San Pedro en la basílica Vaticana entre otras.

El Papa Alejandro VII favorece ampliamente a toda su familia practicando un nepotismo feroz.


ALEJANDRO VII, inicialmente contrario al nepotismo, durante su primer año de su papado prohibió a sus parientes incluso visitar Roma. Sin embargo, durante el consistorio del 2 de abril de 1656, anuncia que su hermano y sus sobrinos acudirán a asistirle quedando a partir de entonces en manos de sus parientes la administración eclesiástica. Esta medida, que supone un nuevo florecimiento del nepotismo, la complementa proporcionando a los miembros de su familia que reside en su ciudad natal los puestos civiles y eclesiásticos mejor pagados así como magníficos palacios y haciendas.

El Papa Alejandro VII, publica la bula Ad Sanctam Beati Petri Sedem, acerca de las proposiciones de Jansen.


ALEJANDRO VII se decanta por los jesuitas en su conflicto con los jansenitas, cuya condena ya ha apoyado ardientemente en su etapa como consejero de Inocencio X. Los jansenitas franceses afirman que las proposiciones condenadas por Inocencio X en 1653 no pueden encontrarse en el libro Agustinus, escrito por Cornelius Jansen, pero no sólo no logran que ALEJANDRO VII levante dicha condena, sino que es confirmada mediante la publicación, el 16 de octubre de 1656, de la bula Ad Sanctam Beati Petri Sedem, en la que declaraba que cinco de las proposiciones de Jansen, en su mayoría aquellas concernientes a la gracia y a la naturaleza pecaminosa del hombre, son heréticas. También envía a Francia su famoso «formulario», que ha de ser firmado por todo el clero como manera de detectar y extirpar el Jansenismo.

Dentro de la controversia jansenista, en 1657, los obispos franceses asumen su sumisión al pontífice vaticano.


Dentro de la controversia jansenista, en 1657, los obispos franceses asumen su sumisión al pontífice vaticano, excepto Arnauld y sus partidarios de la abadía de Port-Royal, lo que mantiene abierta la brecha en el seno del catolicismo.

ALEJANDRO VII fomenta las artes, encargando a Bernini la columnata de la Plaza de San Pedro.


ALEJANDRO VII fomenta las artes, encargando a Bernini la columnata de la Plaza de San Pedro, construida en dos arcos que conducen hasta la basílica, compuestos de 288 columnas y 88 pilares y decorados con 140 estatuas. Las dos alas de la columnata son como dos brazos abiertos que acogen a todos los hombres en ademán de caridad. Las obras finalizaron en 1663. Así terminó un período de más de cien años que había sido testigo de la renovación completa de una gran iglesia. Se ha dicho con cierta justicia que la basílica de S.Pedro no tiene unidad de estilo, que es teatral, que consiste en una serie de partes inconexas. Sin embargo, el conjunto de la plaza de S.Pedro y la basílica produce una gran sensación de obra acabada y despierta un vivo sentimiento de acción de gracias.

En política exterior el pontificado de ALEJANDRO VII se ve ensombrecido por la continua fricción con el Cardenal Mazarino, consejero de LUIS XIV de Francia.


En política exterior el pontificado de ALEJANDRO VII se ve ensombrecido por la continua fricción con el Cardenal Mazarino, consejero de LUIS XIV de Francia y regente durante su minoría de edad. La enemistad entre Mazarino y Alejandro tiene su origen en las negociaciones que desembocaron en la Paz de Westfalia y que ambos viven desde posiciones enfrentadas. Mazarino impide que LUIS XIV envíe ante el papa la usual embajada de obediencia y pleitesía. Posteriormente y, mientras dura su vida, frustra el nombramiento de un embajador francés en Roma, haciendo que los asuntos diplomáticos queden en manos de los cardenales, con frecuencia enemigos personales del Papa. La muerte de Mazarino no supone una distensión de las relaciones ya que aunque, en 1662, se ha nombrado embajador al Duque de Crèqui este mantiene una política igualmente hostil hacía ALEJANDRO VII. Incluso se provoca que LUIS XIV tome represalias tan desproporcionadas como despojar temporalmente a la Santa Sede de sus posesiones en Aviñón y amenazar con una fulminante declaración de guerra. El conflicto se soluciona cuando el pontífice, sufriendo una denigrante ofensa, firma, en la fecha, un incondicional tratado de paz.