Pablo Ruíz Picasso tras una etapa en la que sintetiza diversas orientaciones, en 1906 incorpora nuevos elementos a su pintura, que quedarán plasmados en “Les demoiselles d’Avignon” (1907). Superficies planas, perfiles definidos y una paleta severa son algunas de sus características. Los paisajes geométricos, los retratos y naturalezas muertas cada vez más cercanas a la abstracción, conforman el denominado “cubismo analítico” (A partir de 1912 se iniciará el “cubismo sintético”, con la incorporación a la imgen de signos, cifras y letras).

Ningún otro beso de la historia de la pintura es tan famoso como “El beso de Gustav Klimt”. El pintor austriaco Gustav Klimt realizó este óleo sobre lienzo entre 1907 y 1908. Actualmente está expuesto en la Österreichische Galerie Belvedere de Viena. Como se aprecia en la pintura, la mujer parece aceptar el beso resignadamente mas que participar en el mismo.

El hermano mayor de Salvador Dalí, también llamado Salvador (nacido el 12 de octubre de 1901 y bautizado como Salvador Galo Anselmo), ha muerto de un «catarro gastroenterítico infeccioso» el 1 de agosto de 1903, unos nueve meses antes de que naciera su hermano Salvador DALÍ. Esto marca mucho al artista posteriormente, quien llega a tener una crisis de personalidad, al creer que él es la copia de su hermano muerto. Con cinco años, sus padres lo llevan a la tumba de su hermano y le dicen que él es su reencarnación, una idea que él llegará a creer.

El nombre más prestigioso de la pintura de los primeros años de siglo XX es el del mallorquín Hermenegild Anglada Camarasa. Sus impresiones de la vida nocturna parisina sorprendentes por la sutileza de los colores, tienen un gran éxito. Después derivará hacia el sensualismo y los temas folklóricos valencianos y gitanos, por lo que obtuvo premios internacionales. Pero la mayor figura será Joaquim Mir, quien, lejos del ambiente artístico catalán, en Mallorca, creará una obra homologable a las corrientes más modernas del postimpresionismo, tanto por la expontaneidad de los colores y la enorme riqueza plástica como por una ausencia de figuración, que presagiará la llegad del Vanguardismo. Otros pintores de la generación son Xavier Nogués, Joaquim Torres Garcia, Feliu Elias, Josep Maria Sert o Joaquim Sunyer.

El pintor ruso Vassili Kandinsky presenta en una galería de Munich el cuadro Primera Acuarela Abstracta, en el que se enfatizan los aspectos cromáticos, formales y estructurales del cuadro, prescindiendo de la figuración.

Fallece en Barcelona, víctima del tifus, el pintor catalán Isidre NONELL, miembro destacado de la Colla del Safrà. Empieza en una línea luminista, desde la que evolucionará hacia temas suburbiales hasta crear un expresionismo propio, con pinturas de soldados que vuelven de la derrota de Cuba, gitanos, ladronzuelos, etc. Su pincelada es nerviosa y breve, con trazos gruesos que resiguen los contornos y resaltan el conjunto de la obra. El contenido marginal de sus dibujos no gusta ni al público catalán ni al francés. En París, expondrá con éxito relativo en diversos salones con el grupo de Peintres Impressionistes et Symbolistes. Poco antes de morir, empezará a ser exaltado y mitificado por las nuevas generaciones de pintores que valoran el realismo y absoluta sinceridad.

Vincenzo Peruggia, un carpintero italiano, roba “La Gioconda” de leonardo da Vinci del Museo del Louvre con la intención de que el cuadro retorne a su país de origen. Se recuperará el 13 de diciembre de 1913.

Se inaugura en la galería Thannhauser de Múnich la primera exposición programática de un grupo de artistas surgido de la secesión de la Nueva asociación de artistas muniquenses. El primero en separarse es el pintor ruso Vasili Kandinsky, al que se unen su compañera Gabriele Münter y Franz Marc. Los pintores rusos Alexei von Javlensky y Marianne von Verefkin siguen asimismo el ejemplo de Kandinsky. El grupo recibirá su nombre de un almanaque editado por ellos, cuyo título, El Jinete azul, lo tomarán de un cuadro de Kandinsky. Poco a poco irá surgiendo una especie de movimiento artístico que se rebela contra la pintura académica, imitadora de la realidad, y que postula una realidad autónoma del arte. Quieren regresar a los orígenes de la pintura. Desempeñan un importante papel los dibujos infantiles.

Además de un genial pintor, Salvador DALÍ es un personaje provocador e incapaz de pasar inadvertido. “Jugando a ser genio llega uno a serlo», dice ya en su niñez. Para algunos la excentricidad del genio bordea la locura, aunque él rechaza la posibilidad: «La única diferencia entre un loco y yo es que yo no estoy loco». De familia acomodada y convencional, pronto demuestra sus dotes de niño prodigio, pintándose a la edad de diez años en un cuadro que titula “El niño enfermo”. Su precocidad es extraordinaria, ya que pasa en sus obras de adolescencia del impresionismo al cubismo antes de alcanzar la mayoría de edad.

En 1916, Salvador DALÍ descubre la pintura contemporánea durante una visita familiar a Cadaqués, donde conoce a la familia de Ramón Pichot, un artista local que viaja regularmente a París, la capital del arte del momento. Siguiendo los consejos de Pichot, su padre lo envía a clases de pintura con el maestro Juan Núñez. Al año siguiente, su padre organizó una exposición de sus dibujos al carboncillo en la casa familiar. A los catorce años (1919), Dalí participará en una exposición colectiva de artistas locales en el teatro municipal de Figueras y en otra en Barcelona, auspiciada por la Universidad, en la que recibirá el premio Rector de la Universidad.