Total de piezas: 178
Con el Reino Unido, Dinamarca es uno de los países más «euroescépticos » y esto es puesto en evidencia en junio de 1992, cuando el referendum rechaza el Tratado de Maastricht que establece los términos de la unión política y económica de Europa. Los daneses lo rechazan por una diferencia de un 51% frente a un 49%.
En 1992, el gobierno de la Confederación Helvética solicita oficialmente la adhesión a la Unión Europea. Pero, como consecuencia del resultado negativo del referéndum del 6 de diciembre de 1992 sobre el acuerdo relativo a la integración de Suiza en el Espacio Económico Europeo, las relaciones bilaterales entre Suiza y la Comunidad siguen basándose en los acuerdos existentes (acuerdo de libre comercio, acuerdo marco en materia de cooperación científica y técnica, y acuerdo de tránsito), y la solicitud de adhesión de Suiza pierde la oportunidad de llegar a buen término. A pesar de las dificultades planteadas por dicha votación, la Comunidad deja patente su voluntad de mantener y profundizar sus relaciones con Suiza. Quienes se oponen a la adhesión de Suiza a la Unión Europea piensan que tal integración atentaría contra ciertos principios fundamentales del sistema político suizo, a saber, la neutralidad y la democracia directa, y conllevaría un riesgo de aflujo masivo de extranjeros.
Tras concedérseles una serie de exenciones en temas de defensa común y moneda única, los daneses apoyan el Tratado de Maastricht en un segundo referéndum celebrado en mayo de 1993, por un estrecho margen de mayoría. La condición que se ha impuesto es la de que el país no se integre en la Unión Económica y Monetaria. El apoyo danés a la UE sigue siendo poco entusiasta, ya que muchos ciudadanos tienen miedo de perder el control local a manos de una burocracia europea dominada por países más poderosos.
En un nuevo referéndum sobre el Tratado de Maastricht es aprobado en Dinamarca con un 56,8% de los votos. En él se decidía si las excepciones concedidas mediante una especial fórmula jurídica otorgada por la UE (que la mantenían al margen de la unión económica y monetaria, de la defensa común y de la ciudadanía comunitaria) eran suficientes.
En la fecha, en Copenhague, se establecen los criterios fundamentales para que un país pueda ingresar en la UE. Por otra parte, se establece el mercado único europeo. La Comunidad Económica Europea (CEE) pasa a denominarse Unión Europea, anunciando así su vocación integradora, más allá de lo meramente comercial. Los movimientos especulativos sólo se superarán con drásticas intervenciones de los bancos centrales y devaluaciones generalizadas.
En abril de 1994, Hungría solicita su ingreso para ser miembro de la Unión Europea (UE).
Un referendum confirma la adhesión del Principado de Liechtenstein al espacio Económico Europeo, que se hizo efectiva el 1 de mayo. La situación geográfica de este principado independiente, es, en el centro de Europa, entre la provincia austriaca de Vorarlberg, al extremo occidental de este país, y el Rin, que lo separa del cantón suizo de los Grisones, al extremo oriental de Suiza. La población es de origen alemán en su mayoría. Su lengua oficial es el alemán, y la religión dominante, la católica. Su capital es Vaduz. Tiene 160 km2 siendo, por lo tanto, el menor estado europeo después de la Ciudad del Vaticano (0,44 km2), el Principado de Mónaco (1,8 km2) y la República de San Marino (61 km2).
Acuerdo pesquero entre Canadá y la UE, que pone fin al conflicto del fletán (iniciado con la captura del congelador español Estai cinco semanas antes). Supone para la flota canadiense un aumento del 100%, y para la española una reducción del 80% de los puestos de trabajo y los barcos.
En julio de 1995, Vietnam firma el Acuerdo-marco con la Unión Europea.
