YAZDEGER III (632-651), el último rey de reyes sasánida. Nieto de Cosroes II.

Los rigores de la guerra recien concluida han hundido al imperio persa. Por esto, el último rey sasánida, YAZDEGER III, carece de medios para derrotar a los árabes y opta por huir. Su hijo, Firuz, último príncipe sasánida, tiene que emigrar a China. Los árabes vencen en la batalla de Hehavend y toda Persia (incluido Armenia) cae en poder de éstos. Así, pues, la Persia sasánida desaparece tras cuatro siglos de existencia. Irán se convierte al Islam. (Será menester esperar hasta el siglo XVII para ver en el poder a una dinastía propiamente iraní.)

Muere asesinado en Merv, YAZDEGER III, último de los reyes sasánidas Los árabes completan la conquista de la meseta persa. Así, pues, en 650 la Persia sasánida ha desaparecido tras cuatro siglos de existencia, en tanto el Imperio romano de Oriente se ve reducido a Asia Menor, los Balcanes y las provincias situadas en el Oeste, en el norte de África y en Italia. Dado que las provincias perdidas nunca se recuperarán, los historiadores occidentales se referirán a lo que resta del Imperio romano de Oriente, como «Imperio bizantino». Este nombre proviene de Bizancio, la ciudad en cuyo emplazamiento había fundado Constantino I, más de tres siglos antes, Constantinopla. Para los habitantes de esta última, sin embargo, el país seguirá siendo el «Imperio romano», con independencia de las reducciones que llegó a sufrir. El avance árabe no será completamente destructivo. Los árabes introducirán en Europa el molino de viento por esta época. Se trata de una fuente de energía muy útil que ya es conocida desde hace siglos en Persia.