La ofensiva alemana contra Rusia lanzada el 22 de junio de 1941 proporciona a España la posibilidad de cumplir sus compromisos con el Eje Berlín-Roma. Desde el punto de vista del Régimen español, la lucha ahora tiene más sentido que nunca y su objetivo primordial es el comunismo ruso, el enemigo número uno del Gobierno de FRANCO. En veinticuatro horas los oficiales españoles piden una oportunidad para tomar parte en la campaña rusa de alguna forma, sin que implique la entrada oficial en la guerra. El 24 de junio Serrano Súñer pronuncia su famoso discurso «Rusia es culpable» ante una enorme congregación en la puerta de la sede falangista. Responsabiliza a la Unión Soviética de toda la destrucción que hubo durante la Guerra Civil e insiste en que el exterminio de Rusia es exigencia de la historia y del porvenir de Europa, de modo que España se convierte en belígerante moral en el nuevo conflicto.

José Luis Arrese pide oficialmente la formación de una legión de voluntarios para combatir en Rusia dentro de las filas de la ‘Wehrmacht’ alemana, los militares aconsejan que también participen profesionales. Finalmente, se constituye la División Azul -por el color de la camisa del uniforme falangista- formada por cerca de 40.000 soldados, muchos de ellos jóvenes falangistas, que atraídos por la acción y la propaganda antisoviética, se presentan voluntarios. El general Agustín Muñoz Grandes es designado jefe la División y el coronel J.M. Troncoso primer jefe del Estado Mayor. (Será disuelta el diciembre de 1943, momento en que se declarará la neutralidad española a la guerra).

En la fecha, los 18.694 primeros hombres de la División Azul parten de España con destino al frente ruso-alemán. A pesar de que España, ante la Segunda Guerra Mundial, ha adoptado los estatutos de país no beligerante envía un contingente de soldados al lado de los nazis que combatirá, sobre todo, contra las fuerzas de Stalin. El propio FRANCO es víctima del entusiasmo que se ha desatado entre los militares. En su discurso ante el Consejo Nacional de la FET del 17 de julio denuncia a los eternos enemigos de España y hace claras alusiones no sólo a la Unión Soviética sino también a Gran Bretaña, a Francia e incluso a EEUU. Y añadió: «Ni el continente americano puede soñar en intervenciones en Europa sin sujetarse a una catástrofe… Se ha planteado mal la guerra y los aliados la han perdido». En su frase final aclamaba a la Alemania nazi por dirigir la «batalla que Europa y el Cristianismo desde hace tantos años anhelaban, y en que la sangre de nuestra juventud va a unirse a la de nuestros camaradas del Eje, como expresión viva de solidaridad». Ésta es la declaración pública más exaltada que hace FRANCO apoyando la causa del Eje, y que sorprende tanto a Serrano Súñer como al embajador alemán.

Se inugura el túnel de Viella que conecta de forma directa la vall d’Aran con el resto del Principado. El túnel inaugurado, de 5.133 metros de longitud, es un paso estrecho por el cual los viajeros han de pasar en fila india. No será hasta 1948 que se abre a la circulación de vehículos.

La culminación de la carrera autarquista hacia la industrialización de España es la creacion, el 25 de septiembre de 1941, del Instituto Nacional de Industria (INI) para impulsar la rápida industrialización del país, debido a la insuficiencia del capital privado. El INI es un holding estatal impulsado por el ingeniero José Antonio Suances, amigo personal de Franco, siguiendo el modelo del IRI de Mussolini. Se crearán numerosas empresas públicas en sectores estratégicos como el energético (ENDESA, REPES siderurgia (ENSIDESA), construcción naval (BAZÁN, Astilleros de Cádiz), transporte (PEGASO, SEAT, CASA, ENAS refinerías (Puertollano), comunicaciones (IBERIA, AVIACO) y otras muchas industrias químicas, farmaceúticas, de metal, etc. Estas empresas, al resultar poco rentables para la economía privada recibirán una constante ayuda estatal, lo que generará un enorme gasto público. Por otra parte, el INI cubrirá las deficiencias del sector industrial, haciéndose cargo de negocios poco rentables. Debido a que los impuestos directos son inexistentes y a la falta de divisas, el Estado financiará este enorme gasto público con la emisión de Deuda Pública, adquirida por los bancos de forma obligatoria, lo que originará una gran inflación.

Aunque en un principio la División Azul española tiene que luchar en el frente de Moscú, su destino la lleva a frentes secundarios al este de Leningrado, donde llega a principios de octubre de 1941. La División Azul es considerada por el alto mando alemán como una unidad secundaria de escaso valor operativo. A pesar de la propaganda de los medios periodísticos españoles que ensalzan los actos heroicos de los divisionarios, la realidad es muy distinta. Mal equipada y peor asistida, la unidad -que toma posiciones como la División 250 del gran Wehrmacht alemán- combatirá en acciones menores.

El ejército alemán -mientras se mantiene el asedio de Leningrado- comienza con la Operación Tifón, la ofensiva contra Moscú. Entre tanto, HITLER habla en Berlín al público alemán y describe las dimensiones de su victoria: 2,5 millones de prisioneros, 22.000 armas capturadas, 18.000 tanques destruidos y 145.000 aviones rusos derribados. Ante tales pérdidas, se pregunta cómo puede existir todavía el Ejército Rojo.

Nace ALFONSO, hijo de JUAN de Borbón y de Dª MARÍA de Borbón y de Orléans. Es hermano de JUAN CARLOS. En el mismo año del nacimiento de Alfonso, la familia se traslada a Suiza, intalándose en Lausanne. ALFONSO fallecerá prematuramente en un accidente de tiro en Estoril en 29/3/1956.

El 12 de octubre, festividad de la Virgen del Pilar, patrona de la Hispanidad y de la División Azul, los españoles ocupan su puesto en el frente. Empieza la batalla del río Volchov. La temperatura empieza a caer hasta los 5 grados bajo cero. Será su bautismo de fuego al servicio del ejército alemán. Combate contra los soviéticos en el frente de Leningrado en las cercanías del lago limen, y deja muy buen recuerdo de su valor, aunque también de su improvisación.

El Gobierno británico intenta influir a FRANCO en el sentido contrario que los alemanes, facilitando juiciosamente la importación de alimentos de primera necesidad y materias primas, a la vez que aceptan de forma poco clara las ambiciones territoriales de FRANCO. En privado se declara simpatizante, en principio, con el caso español por tener una zona más amplia en Marruecos. En una declaración pública del 22 de octubre, FRANCO afirma que Gran Bretaña espera ver a «España ocupar el lugar que le corresponde… «. Con una astucia maquiavélica similar, los diplomáticos británicos inician un chantaje sistemático y a gran nivel de unos diez generales españoles ingresando millones de dólares en sus cuentas bancarias en Nueva York y Buenos Aires.