En las elecciones generales de febrero de 1918, la Lliga Regionalista obtiene el triunfo en Catalunya.


En las elecciones generales de febrero de 1918, la Lliga Regionalista obtiene el triunfo en Catalunya. Pero fracasa en su intento de poner en pie una coalición regionalista en el resto de España frente a los fragmentados partidos dinásticos, aunque tampoco sale de los comicios ninguna mayoría dinástica posible.