Durante el mes de Ramadán (nombre del noveno mes del año lunar musulmán) del año 601 MAHOMA, se retira a meditar a una cueva. Allí, según él, tiene una serie de visiones y revelaciones; asegura que se le ha aparecido el Arcángel Gabriel, enviado por Allah (Dios). MAHOMA no sabe leer ni escribir, por lo que tiene que grabar en su memoria lo que ha oído. La religión que funda MAHOMA recibe el nombre de Islam, que significa rendición, sometimiento (se entiende que a la voluntad de Dios). Estas revelaciones pasarán de Mahoma a sus seguidores y en el año 650 se recogerán en el Corán en su versión oficial, actualmente válida. Los comienzos serán lentos. MAHOMA, al principio, se limitará a predicar a los miembros de su familia y a sus amigos. Los habitantes de La Meca, acostumbrados a los beneficios de los florecientes peregrinajes paganos de su ciudad, le toman por loco.
