Formación de la Unión Evangélica por los príncipes alemanes protestantes, dirigida por FEDERICO IV.


Ante la fuerza de la Contrarreforma, y después de las guerras de Aquisgrán (1593-1598), de Colonia (1600) y de Estrasburgo (1592-1604) que han enfrentado a católicos y protestantes, el resultado es la formación de la Unión Evangélica, en 1608, por los príncipes alemanes protestantes, dirigida por FEDERICO IV, elector del Palatinado, un Estado alemán del Rin Medio, que cuenta con la ayuda de Francia, Inglaterra y Provincias Unidas. Queda dispuesto el escenario para una guerra religiosa; todo cuanto se necesita es una chispa que la encienda.