LEÓN III el Isáurico promulga un edicto por el que prohibe las imágenes en las iglesias.


La representación de Dios está prohibida en el judaísmo. Los cristianos no tuvieron problemas al principio y fue surgiendo un arte cristiano especialmente centrado en la representación de Cristo. Pero con la irrupción del Islam, que también prohíbe representar a Dios en imágenes, y la postura del emperador al respecto, surge una fuerte corriente enemiga de las imágenes. Así, LEÓN III el Isáurico que está decidido a acabr con las imágenes, promulga, en 726, un edicto, que aunque no prohibe las imágenes en las iglesias, limita su uso. Influenciado tal vez por el Islam al que ha combatido, posteriormente ordena que se quiten de las iglesias todas las representaciones de santos extendiéndose a las imágenes de Cristo y de la Virgen. Concretamente, en la fecha, el emperador destruye una imagen de Cristo muy venerada que se encontraba encima de la puerta de su palacio de Constantinopla. Parece, pues, que el emperador LEÓN III el Isáurico quiere purificar la religión popular y limitar de pasada, la influencia de los monjes, grandes defensores de las imágenes.