Nace en Noyon (Francia), tierra de picardos, JUAN CALVINO. Escritor de talento, buen organizador, teólogo competente, pero de un extremado fanatismo. Poseerá todas las cualidades de un francés cabal: lúcido, seguro de sí mismo, elegante en sus modales, lógico en su dialéctica, brillante en su oratoria, firme en sus convicciones y bien dotado para el caudillaje y la organización de masas.
JUAN CALVINO (Reformista protestante)/CALVINISMO
Total de piezas: 11
CALVINO dice que experimenta una «conversión».
CALVINO recibe una educación esmerada. Una desgracia familiar -la ruptura de su padre con el cabildo de Noyon por cuestiones de dinero, la excomunión y muerte de aquél- desvela el destino de aquel joven atildado, silencioso y culto que promete convertirse en un digno hombre de leyes. JUAN CALVINO debe de ver en aquel momento todas las deficiencias de la organización eclesiástica vigente en su país y se siente impelido, como Lutero unos años antes, a luchar por una reforma en profundidad que permita la vuelta a un cristianismo más puro y auténtico. CALVINO dice que experimenta una «conversión».
CALVINO rompe con la Iglesia oficial y lee un escrito ante los estudiantes de la Universidad de París.
CALVINO rompe con la Iglesia oficial colaborando en la redacción de un escrito -con abundantes citas de Lutero- que se lee -en la fecha- ante los estudiantes de la Universidad de París. Ante la violenta reacción oficial se ve obligado a huir de París comenzando un largo éxodo que habrá de culminar en Ginebra (Suiza), ciudad que estrena su libertad política y religiosa y que por ello permite todos los experimentos imaginables, incluso el de una teocracia protestante. Al poco tiempo, CALVINO y sus discípulos la habrán convertido en una ciudad puritana que será llamada la «Roma del protestantismo». En efecto, CALVINO empieza a elaborar una nueva doctrina, basada en gran parte en la predestinación. Según esa doctrina, Dios ha destinado unas almas a la salvación y otras a la eterna condenación. Al parecer, no repara en que el modo de vida extremadadamente severo que predica contradice su doctrina sobre la predestinación.
La Reforma no se limitará a Alemania. CALVINO la impulsará en Suiza, Francia, Escocia, etc.
CALVINO, afincado en Ginebra, desarrollará una doctrina propia claramente distinta de la luterana. Partirá de la idea de «predestinación», la determinación previa de la vida de las personas, «… pues no todos han sido creados en las mismas condiciones, sino que unos les ha sido predestinada la vida eterna, y a otros la eterna condenación». Según la doctrina calvinista, la pertenencia al número de los elegidos por Dios se evidencia ya en la vida de cada cual: quien consiga aumentar sus propiedades mediante una existencia laboriosa y austera, le esperará la vida eterna; quien no lo logre, acabará en el infierno. El ánimo de lucro que CALVINO propondrá a sus seguidores se considerará una importante fuerza impulsora del capitalismo moderno. En Francia a los calvinistas se les llamará «hugonotes». Los calvinistas escoceses e ingleses se llamarán «puritanos», muchos de ellos emigrarán más tarde a América e influirán poderosamente en la formación de los EEUU.
El reformador francés Juan CALVINO que había sido acogido en Ginebra es mandado al destierro.
El reformador francés Juan CALVINO que había sido acogido en la ciudad de Ginebra, es mandado, en la fecha, al destierro.
Bajo la presión de los ciudadanos berlineses, Brandeburgo se convierte al protestantismo (calvinista).
En la fecha, bajo la presión de los ciudadanos berlineses, Brandeburgo se convierte al protestantismo (calvinistas).
El reformador francés Juan CALVINO, es recibido en Ginebra con aclamaciones, tras su destierro en 1538.
El reformador francés Juan CALVINO, es recibido en Ginebra con aclamaciones populares, después de su destierro de 1538. En ella hará reinar una verdadera dictadura moral: obligación del culto reformado; pena de muerte por idolatría, adulterio, blasfemia, herejía y dando acogida y derecho de ciudadanía a los hugonotes.
El poder absoluto de CALVINO en Ginebra, provoca persecuciones contra los que discrepan del mismo.
El poder absoluto de CALVINO en Ginebra, entre 1541 y 1564, provoca persecuciones entre los que discrepan del mismo o se apartan de la nueva ortodoxia. Los resultados económicos y sociales de la Reforma serán también muy importantes: los franceses, italianos y holandeses que se refugian en los cantones protestantes promueven las manufacturas textiles, la relojería y la orfebrería así como el comercio de estos productos y la banca. No faltarán tensiones con las corporaciones locales, mientras que los territorios católicos siguen con el cultivo de la tierra y la cría de ganado o la explotación forestal.
MIGUEL SERVET, médico y teólogo español, hombre de vastísima cultura, es perseguido por la Iglesia Católica.
MIGUEL SERVET, médico y teólogo español, hombre de vastísima cultura, es perseguido por la Iglesia Católica por haber escrito al menos dos libros en los que niega el origen evangélico de la Santísima Trinidad. (SERVET no fue perseguido por haber descubierto en 1546, en París, la circulación pulmonar de la sangre). Detenido en Viena por la Inquisición Católica logra huir y se refugia en Ginebra, la ciudad que CALVINO ha convertido en laboratorio de la reforma protestante. Los luteranos lo apresan y lo juzgan por herejía. El duelo dialéctico que sostiene con Calvino, antiguo antagonista, hará historia. El porqué SERVET se refugia en Ginebra, conocedor del destino que le puede esperar, sigue siendo una gran incógnita. En la fecha, en Ginebra, muere MIGUEL SERVET, condenado a la hoguera por los tribunales calvinistas de la ciudad: «Arderé, pero eso será un mero incidente. Continuaremos nuestra discusión en la eternidad», dijo antes de morir.
CATALINA de Médicis, en medio de las guerras de religión entre católicos y hugonotes (calvinistas franceses) trata de reconciliarse con los calvinistas.
CATALINA de Médici, regente de Francia, en medio de las guerras de religión entre católicos y hugonotes (calvinistas franceses), trata de reconciliarse, en el año de la fecha, con los calvinistas. Por otra parte, FELIPE II enviaba desde España soldados y dinero en decidido socorro de la católica dama de los Médicis. En los campos de batalla, la suerte se inclinaba de una u otra parte. La reina ISABEL de Inglaterra observaba con simpatía cada triunfo arrebatado a las tropas de CATALINA y CARLOS IX.