Isaac PERAL y Caballero (Cartagena 1852 – Berlín1895) sale -en la fecha- hacia Filipinas con el grado de Teniente, después de haber sido guardiamarina (1866) y haber participado en la Guerra de Cuba como alférez de navío (1872). En Filipinas dirige la Comisión Hidrográfica, pero ha de abandonar su tarea por caer víctima de una epidemia de cólera.

Isaac PERAL, de regreso a España, pasa a explicar física y química en la Escuela de Ampliación de Estudios de Marina, donde dedica todos sus afanes a la búsqueda de un medio adecuado para el transporte y lanzamiento de un torpedo de invención reciente. Peral después de numerosos estudios y experimentos expone la idea a sus superiores y compañeros. Obtenido su aprobación y apoyo, el 9 de septiembre de 1885 se decide a escribir y explicar su invento al Ministro de Marina, Vicealmirante Pezuela y Lobo, que le ordena se presente rápidamente en Madrid para tener una entrevista personal, tras la cual ordena al Capitán General de Cádiz se libren 5.000 ptas. para que el Peral pueda realizar los estudios y experimentos necesarios, antes de presentar un proyecto completo de embarcación submarina. Adentrado en sus investigaciones, resolverá el problema de la navegación submarina con la invención del sumergible que lleva su nombre.

Gracias al apoyo de la reina regente María Cristina, se efectúa la botadura del sumergible ideado por Isaac PERAL Y CABALLERO (30 años después de Monturiol) y construido en el arsenal de La Carraca. Este sumergible funciona con propulsión eléctrica y es bautizado con el nombre de “PERAL”. Permanece, en la fecha, una hora a una profundidad de 10 metros y recorre 4 millas mientras simula el ataque a un navío de guerra. También resiste los embates de una fuerte marejada. España vive entonces momentos cruciales con el conflicto de Las Carolinas. Isaac PERAL decide contar su invento al ministro de Marina pero éste da un informe negativo al respecto y el proyecto es abandonado.

Celebración en aguas gaditanas de las primeras pruebas oficiales del submarino de Peral.

La Comisión técnica encargada de valorar el submarino de Peral se declara en contra de la calidad del mismo, cerrando un proyecto de excepcional importancia para la modernización de la Armada. Peral desengañado, pide el retiro de la Marina por enfermedad, dedicándose a la ingeniería eléctrica. El propio Isaac PERAL en una carta, de la fecha, dirigida al Presidente del Club de Regatas de Barcelona reconoce que N.MONTURIOL fue el primero en submarinos.

Una verruga que tiene en la cabeza Isaac PERAL, herida circunstancialmente por su peluquero, da origen a un tumor que le produce numerosas cefaleas. En 1895 es operado con éxito en Berlín, pero al no cambiarle los apósitos se provoca el origen de una septicemia con fiebres altas, que motivan su muerte (Había nacido en Cartagena, el 1.6.1851). Está enterrado en un gran monumento-panteón en lo más alto de la colina del cementerio de Ntra. Sra. de los Remedios en Cartagena.