En 1996, la ONU presentó un acuerdo en materia de prohibición de pruebas nucleares (CTBT). Fue firmado por 71 países, incluidos los cinco nucleares iniciales, pero aún no ha entrado en vigor. Para ello, el CTBT requiere la ratificación de 44 estados concretos designados por su relación con actividades nucleares. De esos 44, sólo 34 han firmado, pero entre los diez que faltan, siete (China, Colombia, Egipto, Indonesia, Irán, Israel y EEUU.) no lo han ratificado, y otros tres (India, Corea del Norte y Pakistán) ni lo han firmado ni lo han ratificado. “El Consejo de Seguridad está condenando a Corea del Norte por su prueba nuclear, pero al mismo tiempo, los que condenan mantienen para ellos el derecho a hacer lo mismo, lo que es un doble estándar”,dice Blix, representante de la ONU, citando la expresión diplomática al uso para referirse a lo que se conoce como hipocresía. “Sería más fácil exigir responsabilidad a Corea del Norte si ellos mismos la practicaran y se alejaran de las armas nucleares. Son – dice- como un grupo de adultos fumadores empedernidos explicando a los niños que no deben fumar”.

A lo largo de toda la crisis abierta por Corea del Norte, EEUU. y Japón han ido avanzando en la realización de su antiguo proyecto de escudo antimisiles, orientado contra China y los recursos militares rusos del Extremo Oriente, pero en gran parte justificado en la amenaza nuclear norcoreana. Las pruebas de tal escudo realizadas hasta ahora, con un gasto extraordinario, sugieren, con bastante claridad, que tal sistema no funciona. Sumándolo todo, Selig Harrison, un experto americano en Corea del Norte, declaró lo siguiente tras la explosión nuclear norcoreana; “EEUU. ha construido un sistema de defensa de misiles que no funciona, para la defensa contra unos misiles de Corea del Norte que no funcionan y que podrían llevar una cabeza nuclear que tampoco ha funcionado”.

La ONU aprueba la resolución 1718 que impone sanciones comerciales y armamentísticas a Corea del Norte, pero excluye la opción militar.

El caudillo norcoreano Kim Jong Il, recibe, en la fecha, en Pyongyang, al enviado especial chino, Tang Jiaxuan, portador de un mensaje personal del presidente Hu Jintao, el chino se ha pasado tres horas haciendo un repaso de toda la historia de la ayuda que China ha prestado a Corea del Norte durante su medio siglo de existencia como Estado. Kim ha respondido lamentando que su explosión nuclear hubiera perjudicado los esfuerzos chinos, y aclarando que no era esa su intención. A continuación, ha transmitido dos mensajes. Primero: que la desnuclearización de la península coreana ha sido el sagrado imperativo que el fundador del Estado Kim Il Sung (su padre, figura deificada en Corea del Norte) le transmitió en su lecho de muerte, en 1994. Segundo: que la normalización de la política de EEUU. hacia Corea del Norte es la solución al problema nuclear.

Como resultado de una iniciativa china, que hoy ha logrado reunir de manera informal en Pekín a los jefes de las delegaciones norcoreana, estadounidense y china, las conversaciones sobre la crisis “se reanudarán pronto”. El anuncio ha sido bien recibido en Washington, donde el presidente Bush ha dicho que iba a “dar las gracias a los chinos”. La reunión de Pekín da lugar a “un sincero y profundo intercambio de puntos de vista sobre los esfuerzos para continuar con las conversaciones”, señala un despacho de la agencia oficial china Xinhua, citando fuentes del Ministerio de Exteriores chino. “Las tres partes acordaron que las conversaciones a seis bandas tendrán lugar pronto en una fecha conveniente para los seis”.

La negociación sobre el programa nuclear de Corea del Norte, entre EE. UU., Japón, Rusia, China y las dos Coreas, celebrada del 18 al 22 de diciembre, acaban sin alcanzar ningún acuerdo y sin una fecha fijada para retomarla. Las conversaciones a seis, reanudadas en Pekín tras permanecer 13 meses suspendidas, han estado marcadas por las acusaciones mutuas entre EE. UU. y Corea y con el bloqueo financiero de Washington sobre Pyongyang como gran escollo entre ambos. El negociador norcoreano no ha descartado nuevas pruebas nucleares, como la llevada a cabo el pasado octubre

El 13 de febrero del 2007 se alcanza el acuerdo para la Desnuclearización de Corea del Norte, basado en un plan de acción progresivo. Como muestra de buena voluntad (al considerar que Pyongyang ha cumplido 8 de los 10 requisitos para su desnuclearización), Corea del Norte recibe el 20% del millón de toneladas de petróleo prometidas por la comunidad internacional. Conseguido lo anterior, Corea del Norte vuelve al chantaje nuclear como técnica para obtener mayores concesiones, preparándose para lanzar nuevos misiles.

El 5 de abril, Corea del Norte lanza un misil estratégico. En realidad es una decisión perfectamente
calculada para que, una vez la comunidad internacional condene dicho ensayo, Pyongyang pueda poner fin a sus compromisos nucleares.

Segundo ensayo nuclear de Corea del Norte que lanza 7 misiles de corto alcance. Este segundo ensayo, además de perseguir la reafirmación del liderazgo de Kim Jong Il, es una estudiada estrategia para obtener mayores ayudas económicas de la comunidad internacional. Corea del Norte se ha comprometido al desmantelamiento de sus instalaciones nucleares, pero no a su destrucción. Para ello exigirá mayores compensaciones, políticas y económicas.

Corea del Norte invita a los inspectores del OIEA.