ENRIQUE de Aragón Folch de Cardona y Córdoba, es nombrado virrey de Catalunya (1630-1638) (A excepción del año 1632/1633 en que lo fue D. FERNANDO, hermano del rey FELIPE IV)
CONDE DUQUE DE OLIVARES (1621-1643)
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Por fin se celebran las Cortes de Barcelona. Asisten el Rey FELIPE IV y el conde-duque de OLIVARES
Por fin se celebran las Cortes de Barcelona. Asisten, en la fecha, el Rey FELIPE IV y el conde-duque de OLIVARES dispuestos a enmendar errores. Para que las Cortes se tomen el tiempo que quieran para discutir los asuntos, viene con ellos el hermano del Rey, FERNANDO (el Cardenal Infante) que se queda en Barcelona como Virrey de Catalunya y como presidente de las Cortes. El Rey FELIPE IV y OLIVARES regresan a Madrid. A pesar de las buenas disposiciones del Cardenal Infante, parece que todo son dificultades por parte de Catalunya, de manera que al cabo de un año de infructuosas sesiones se darán por terminadas las Cortes
El virrey de Catalunya, duque de Cardona, intenta que Barcelona pague el impuesto real del quinto.
El virrey de Catalunya, duque de Cardona, que vuelve a coger el mando después del lapso 1632/33 en que lo fue el infante FERNANDO, intenta que Barcelona pague el impuesto real del quinto. La ciudad pone en juego toda su capacidad de resistencia, a lo que el duque de Cardona responde con la detención de cuatro miembros del Consejo de Ciento. Todos estos incidentes deterioran las relaciones de los catalanes con el conde-duque y con la Corona. Ante la amenaza de pasar la capitalidad administrativa y judicial del Principado a Girona, el Consejo municipal barcelonés recapacita y aprueba un donativo de 40.000 libras. No es lo que pretende Madrid, pues el Consejo barcelonés debe más de 500.000 libras al tesoro real, pero es un detalle conciliador.
Madrid indica a Catalunya que acceda a la recluta de soldados para defender su propia frontera.
Había entonces que ir pensando en que Catalunya accediera a la recluta de soldados para defender su propia frontera. Una primera petición a Barcelona, para que movilice a 2.000 soldados, es rechazada de plano. Barcelona está molesta y quejosa con Madrid. Como medida conciliadora el gobierno central pone en libertad a los cuatro miembros del Consejo de Ciento que llevan quince meses encarcelados.
Al no poderse embarcar para Génova a 5.000 soldados catalanes, han de ir soldados de Valencia.
La situación en Italia empeora y el conde-duque de OLIVARES pide al virrey de Catalunya que se dirija por mar a Génova con un contingente de soldados catalanes, a lo que contesta el virrey que esto es imposible. Como resultado de este fracaso ha de embarcarse a 5.000 hombres provenientes de Valencia.
Al declarar Francia la guerra a España, OLIVARES cree que al fin podrá llevarse a los catalanes a su órbita
Al declarar Francia la guerra a España, OLIVARES cree que al fin podrá llevarse a los catalanes a su órbita ya que en Catalunya, se considera al país vecino como el enemigo tradicional. Pero en esta ocasión, de resultas de sus diferencias con el ministro, Catalunya se limita a seguir al margen, al menos mientras no sea atacada.
El gobierno de Madrid envía fuerzas militares a Catalunya para defender la frontera de los Pirineos.
Ante la negativa de Catalunya a aceptar la “Unión de Armas”, a participar en la defensa común y a movilizar soldados, el gobierno de Madrid envía fuerzas militares a Catalunya para defender la frontera de los Pirineos. La historiografía nacionalista ve en este hecho un intento de dominar a Catalunya para los planes centralistas del conde-duque de OLIVARES, por esto se ha dicho que, desde 1635, hubo un ejército de ocupación en Catalunya. Ya empezaron entonces las pendencias entre la soldadesca (casi toda extranjera) y la población, a causa de la conducta de los soldados, pero también de la excitación en que estaba el pueblo
La unión de las coronas de España y Portugal, beneficia a la alta burguesía portuguesa.
La unión de las coronas de España y Portugal, beneficia a la alta burguesía portuguesa, que puede disponer de un ejército y de un mercado importantes y participar de la plata americana. No obstante, la discriminación cada vez mayor para con los portugueses en las colonias españolas y la competencia de otras naciones mercantiles, sobre todo Holanda, que debilita el monopolio de las Molucas, se apodera de Ormuz (1622) y comienza la penetración en el Brasil (1624) sin que la corona española pueda impedirlo, hacen que las minorias dirigentes portuguesas dejen de considerar ventajosa la unión con España. La imposiciones de OLIVARES acaban de decidirlas.
Revuelta portuguesa en Évora, contra FELIPE IV.
Revuelta portuguesa contra FELIPE IV. Evora y otros lugares del Alentejo son escenario, en 1637, de una revuelta contra la dominación española de Portugal, en la que destaca la figura de Mamelinho. OLIVARES intenta extender su política centralizadora a Portugal, preparando la fusión administrativa de los dos reinos, Castilla y Portugal, distribuyendo los altos cargos entre castellanos y aplicando diversas modificaciones fiscales. La revuelta de este año en Évora es un primer aviso.
Las tropas españolas se disponen para dirigirse a la fortaleza de Leucata. Se añaden algunos catalanes.
Las tropas españolas se disponen para dirigirse a la fortaleza de Leucata. Con el fin de juntar un ejército, aparte de las escasas fuerzas regulares disponibles, se decide disponer de contingentes de milicias catalanas, pero éstos, siguiendo su Constitución “Princeps namque” que nada más obliga a los catalanes a luchar en guerras defensivas y teniendo en cuenta que Leucata es una plaza occitana, por lo que no se trata de una guerra para defender el territorio catalán, los catalanes no tienen ninguna obligación jurídica de participar en ella. A pesar de la general oposición se empiezan a formar unas pocas compañías de milicias catalanas para participar en la empresa. Girona ofrece una compañía de 90 hombres recomendada por Galcerán de Cartellà Barón de Falgons para servir durante 3 meses en la campaña, una Compañía de la Villa de Olot y Conde de Peralada con 400 hombres y un Tercio de 500 hombres pagado durante 3 meses por el Consell de Cent de Barcelona.