Disturbios en el monasterio de Ganden, al intentar la policia retirar un gran retrato del Dalai Lama.

Explota una bomba en la casa de Sengchen Lobsang Gyaltsen, principal partidario de los chinos en cuanto a la controversia por la sucesión del Panchen Lama.

El 29 de noviembre de 1996 el gobierno chino anula el nombramiento del Panchen Lama realizada por el Dalai Lama, a la vez que anuncia su propio nombramiento al cargo de Panchen Lama en la persona de Gyaltsen Norbu, de cinco años. El gobierno chino declara que Gyaltsen Norbu pertenece a una familia patriótica y que sus padres son miembros del Partido comunista chino, hecho insólito entre los tibetanos, si tenemos en cuenta que el mismo secretario general del partido en el Tíbet es chino, y que este partido nunca ha sido capaz de nombrar un secretario de etnia tibetana en toda su historia. La prensa oficial china acusa a Gendun Chökyi Nyima, a quien el Dalai Lama reconoce como el Panchen Lama, de haber ahogado a un perro. Se desconoce su paradero.

En 1999, el Dalai Lama apunta a una renuncia a la independencia, pero no convence a China.

Se reanudan los contactos entre Pekín y el Gobierno tibetano en el exilio constituido en 1959 y que tiene su sede en Dharamsala (India).

En el año 2001 se celebran elecciones entre los tibetanos exiliados para elegir un primer ministro (kalön tripa), Lósang Tendsin. Está respaldado por un Parlamento de 46 miembros (con un mandato de cinco años) y el Dalai Lama conserva la jefatura del Estado. Ningún país ha reconocido este Gobierno, pero goza del respaldo financiero y moral de Occidente, especialmente de EEUU. Con estos apoyos, el Dalai Lama ha pasado de exigir la independencia a una solución intermedia.

El XIV Dalai Lama, Tendsin Gyatsó, condena sin paliativos el uso de la fuerza para resolver problemas internacionales.

En China cobra relevancia la discriminación con los musulmanes de la provincia de Xinjiang (oeste) y en Tibet. Por otra parte, Pekín apoya a los países árabes en sus ataques contra Israel, quizás esperando que no le tengan en cuenta su trato con los islamistas. India, en cambio ha respaldado las posiciones de EEUU., confiando en que su vigente sistema de castas no sea denunciado.

La autoridades rusas deniegan al Dalai Lama -que reside en la India pero es a la vez el líder espiritual y nacional del Tíbet- el visado de tránsito necesario para efectuar una visita a Mongolia. La medida parece un tributo de Moscú a las buenas relaciones de Rusia con China, cuyas autoridades son extremadamente sensibles a todo lo relacionado con los nacionalismos tibetanos y uigur. Parece ser que ya el mes pasado el Dalai Lama tuvo que cancelar otros viajes por el mismo motivo. Rusia mantiene una estrecha relación con China, sobre todo desde el enfriamiento de relaciones con EEUU. a causa del contencioso del escudo antimisiles, tema en el que Pekín y Moscú coinciden. Los presidentes Putin y Jiang Zemin celebrarán este año tres cumbres.

En Tíbet, todo parece indicar que los tibetanos están divididos. Los jóvenes por no haber conocido otra cosa, por tener escasos puntos de referencia en los que basarse y aquellos que más se han beneficiado de la reforma china han olvidado los ideales independentistas. Por otro lado los que han conservado más vivamente sus creencias religiosas y aquellos que prefirieron el exilio mantienen vivos sus recuerdos, y sueñan con el regreso al pasado.