El español Rafael de Aguiar funda San Nicolás de los Arroyos (provincia de Buenos Aires, Argentina).

Los ingleses llegan a las islas Malvinas al mando del comodoro John Byron. Divisan una pacífica bahía a la que llaman Port Egmont. Los ingleses desembarcan el 23 de enero y Byron toma posesión de las islas en nombre de la corona británica.

El 8 de enero de 1766 llega a Port Egmont (islas Malvinas) una nueva expedición inglesa con tres naves y los veinticinco hombres para la dotación. Fundan un pequeño establecimiento con un torreón como fuerte. Luego parten a explorar la zona y se encuentran con los franceses que estaban en puerto San Luis. Los intiman a desalojar las islas, pero los franceses no aceptan.

Después del acuerdo de cesión al que han llegado Francia y España en relación a las islas Malvinas, en 1767 parten las naves francesas y españolas para efectuar el traspaso. El 1° de abril, en una ceremonia en el puerto San Luis, los franceses entregan las islas al mando español. Éstas pasan a depender de la Capitanía General de Buenos Aires. Se nombra primer Gobernador español de Malvinas a Felipe Ruiz Puente. La situación de los pobladores es muy precaria. Aparte de la incomunicación con el mundo, sus viviendas son muy pobres. El clima es muy frío, y casi siempre está nublado. El puerto cambia de nombre en 1770, pasa a llamarse Puerto Soledad.

En 1769, los españoles se percatan de la presencia de los ingleses en las islas Malvinas. Enterado el gobierno español de esa circunstancia, manda una orden en marzo de 1770 al Gobernador de Buenos Aires, Francisco Buccarelli y Urzúa, para que expulse a los ingleses de las islas por la fuerza si es necesario. Se producen una serie de incidentes hasta que por fin, en la fecha, se decide por los gobiernos inglés y español que España devuelva el establecimiento de Port Egmont a los ingleses -a quienes les había arrebatado en los incidentes anteriores-, y que, por otra parte, no se ponga en juego la soberanía española sobre las islas, la cual se mantiene. Mediante un pacto secreto los ingleses se comprometen a abandonar Port Egmont pasado un tiempo. Inglaterra volverá, pues, a ocuparlo pero sólo por tres años, tras los cuales abandonará definitivamente las islas.

A partir del intento inglés de 1770 por apoderarse de las Malvinas, frustrado por la rápida acción del gobernador de Buenos Aires, Bucarelli, el gobierno español vuelve sus ojos al cono sur de América y el resultado es la creación, en la fecha, del Virreinato del Río de la Plata, comenzando, incluso, la colonización de la Patagonia. Así, el territorio que actualmente (2.000) ocupan Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay es separado de Perú para crear el virreinato del Río de la Plata. Desde un punto de vista institucional, el hecho más importante es la designación de Pedro Antonio de Cevallos como virrey del Río de la Plata. La corte española se decide por Buenos Aires como capital del virreinato, entre otras cosas por su fácil acceso a España a través de la navegación atlántica. Aunque si bien Buenos Aires es la capital, otras ciudades importantes tienen jurisdicción propia. Así, pues, la historia de estos territorios que formaban parte del vasto imperio de los Incas en la época precolombina hasta fines del siglo XVIII es pues, la misma del Perú.

Se produce la reacción contra los británicos de las fuerzas locales en la ciudad de Buenos Aires, comandadas por Santiago de Liniers, que logran la rendición del enemigo el 12 de agosto de 1806.

El 5 de julio de 1807 seis mil soldados ingleses distribuidos en trece columnas inician el avance desde los Corrales de Miserere en dirección al río, en donde se encuentran las fuerzas locales. La tenaz resistencia de los habitantes de Buenos Aires organizados en tres líneas de defensa impide que la ciudad sea ocupada. La defensa de Buenos Aires debe también su éxito al coraje de su población civil.

Vencidos los británicos, el pueblo bonaerense exige un cabildo abierto que se realiza el 14 de agosto de 1807; el virrey Sobremonte es destituido por su cobarde actuación frente al enemigo y en su reemplazo es elegido Santiago Liniers como virrey. Las causas que llevan al pueblo argentino a la sublevación contra España son muchas y complejas; entre ellas destacan el deseo de romper el monopolio comercial inherente al régimen colonial, la confusion de poderes originada por la ocupación de la metrópoli por las tropas francesas, el odio de los criollos contra los funcionarios venidos de España y la influencia de los filósofos franceses, de la francmasonería y de la revolución norteamericana.

El 25 de mayo de 1810, los integrantes del cabildo abierto de la ciudad de Buenos Aires (que había sido convocado el día 22) deciden deponer al virrey e instaurar un gobierno provincial, la Primera Junta de Gobierno, que actúa en nombre de Fernando VII. La bandera de Argentina, para evitar que la Junta sea considerada rebelde por la Corona española, queda representada por la enseña borbónica. (Desde entonces, pues, la bandera argentina es idéntica a la de los borbones).  Se ha iniciado la revolución argentina. Después de la Revolución de mayo, algunas ciudades -como Córdoba- se opondrán a la decisión arbitraria de Buenos Aires y surgirán algunos movimientos antirrealistas. Mientras tanto, Buenos Aires decide propagar el movimiento revolucionario enviando expediciones al Alto Perú y a Paraguay para que estos territorios se adhieran a la nueva forma de gobierno, pero al estar dominados por los españoles, optan por permanecer separados. Entre 1810 y 1815 se sucederán varios gobiernos: Primera Junta, Junta Grande, Primer Triunvirato, Segundo Triunvirato; todos ellos tendrán su sede en Buenos Aires y asumirán las mismas funciones del virrey.