PRISCILIANO decide viajar a Aquitania y posteriormente a Roma para defenderse, pero el obispo de Roma, DÁMASO (en plena pugna por obtener la primacía de la sede romana y convertirse, así, en el primer Papa “oficial”), se niega a recibirlo por no considerarse competente para anular un rescripto del emperador. Finalmente viaja a Milán, donde reside el emperador, y aprovecha la ausencia de GRACIANO para convencer a su magíster officiorum de que anule el anterior decreto imperial. De este modo puede regresar a Hispania, reafirmando la situación de su grupo y consiguiendo, de paso, que ITACIO sea acusado de perturbador de la Iglesia. El procónsul Volvencio ordena la detención del obispo antipriscilianista ITACIO y éste se ve obligado a huir a Civitas Treverorum (Tréveris), bajo el amparo del obispo Britto.
Prisciliano decide viajar a Roma para defenderse.
Esta pieza también aparece en ... HISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA. De Constantino al Concilio de Trento (313 - 1545) • PRISCILIANISMO (PRISCILIANO)