Reuniéndose las Cortes de España, en la fecha, AMADEO I demuestra ?estar de acuerdo con la voluntad de dicha asamblea y pronuncia un discurso a tono con los principios constitucionales. Educado en la corte de su padre, mostrará gran afición por los asuntos militares, para los cuales manifiesta grandes dotes. Pero aunque lleno de buena voluntad, el nuevo soberano español -que no sabe una palabra de castellano- nunca conseguirá ganar la simpatía de sus súbditos. Por supuesto, estaban contra él los republicanos, pero también los monárquicos, que no ven encarnado en ese hombre de actitudes y vestimentas burguesas su ideal de la monarquía. Por otra parte, la primavera de este año (marzo-mayo) conocerá un incremento de la tensión social en varios países europeos, entre ellos España, como consecuencia del movimiento revolucionario de la Comuna de París.

El golpe de estado que ocurre en París después de la derrota con Prusia y el brusco cambio político obligan a la familia española de ISABEL II y sus hijos a dejar la capital francesa, sumida en un caos. Se trasladan a Ginebra y viven casi un año en un hotel de aquella ciudad.

Se produce un atentado en Madrid contra AMADEO I de Saboya y su esposa María Victoria, cuando regresan -al anochecer- en coche descubierto al Palacio Real, por la calle Arenal. Afortunadamente, no tiene más consecuencias que un buen susto.

La mayoría parlamentaria en España no es ni mucho menos homogénea, por lo tanto, el gobierno SERRANO es pronto sustituido por otro que dirigirá Manuel Ruiz ZORRILLA (24/07/1871-05/10/1871.

La vuelta a un París más apaciguado, en agosto de 1871, convertido en capital de la Tercera República, significa para los jóvenes -ALFONSO y sus hermanas- la reanudación de sus actividades docentes. Pero la vida social no es la misma, con el Palacio de las Tullerías cerrado, los reyes de Francia en el exilio y muchos de sus antiguos amigos en situación precaria. Por suerte, el marqués de Alcañices no ha perdido su dinero ni su influencia y puede seguir ayudando y aconsejando a don ALFONSO. Tampoco CÁNOVAS, desde España, ha dejado de preocuparse por la suerte de la familia real. Y todos ellos piensan entonces que el joven ALFONSO, que va a cumplir catorce años, debe seguir sus estudios en otro lugar, ya no en territorio francés, sino en el Imperio austrohúngaro, a ser posible. Con ello adquiriría una formación más completa, conocería la lengua alemana y viviría entre personas de ideas y sentimientos semejantes a los suyos, en un estado monárquico y católico, no republicano y laico como Francia.

En los meses de agosto y septiembre, AMADEO I -rey de España- viaja por Albacete, Valencia, Castellón, Tarragona, Barcelona, Girona Lérida, Zaragoza y Logroño, en un intento de ganarse las simpatías populares, pero no obtiene los resultados que esperaba. Cuando el rey AMADEO I se encuentra en Lleida, se presenta inopinadamente en una Barcelona de pleno entregada a las fiestas mercedarias, y provoca algún que otro problema de protocolo y una cierta perplejidad entre las autoridades. Su Majestad irrumpe en el Café de las Siete Puertas y a la hora de despedirse paga religiosamente la cuenta, pese a la insistencia de Josep Cuyás su propietario, en invitarle.

La debilidad y el enfrentamiento interno en el seno de los partidos “amadeístas” producen una nueva crisis ministerial que se salda con la sustitución del gobierno Ruíz Zorrilla por otro del que se encarga al general Malcampo. Aunque no aparece entre sus miembros, el nuevo gabinete está bajo la influencia de SAGASTA.

Después de un largo debate sobre la Internacional, las Cortes españolas declaran su inconstitucionalidad por 192 votos contra 38.

La inestabilidad política y la tensión social provocan un nuevo cambio en el gobierno que pasa a estar encabezado por SAGASTA.

El centro escogido para la educación del futuro ALFONSO XII, fue la Ritter Akademie de Viena, recordada aún con el nombre tradicional de Theresianum. ALFONSO ingresa en 1872 y permanecerá en aquel lugar casi tres años, cuando ya habrá cumplido los dieciséis y parecerá llegado el momento de dar por terminados sus estudios humanísticos. Comenzará entonces la preparación militar de aquel futuro “rey soldado” con que sueña Antonio CÁNOVAS del Castillo.