CÉSAR interviene en la disputa por el trono egipcio a favor de la reina CLEOPATRA.


CÉSAR decide, pues, poner en orden las disputas dinásticas y erigirse en árbito del conflicto egipcio. Muertos Potino, Aquilas y el propio Tolomeo XIII, CÉSAR interviene, en la fecha, en la disputa por el trono egipcio a favor de la reina CLEOPATRA, hija de TOLOMEO XII, y de otro de sus hermanos, el más joven de ellos, TOLOMEO XIV, de trece años de edad, con quien ha de casarse siguiendo la costumbre egipcia y la decisión de CÉSAR. Ahora, sin embargo, tal como atestiguan las inscripciones de la época, se sitúa a CLEOPATRA en primer lugar. Es, en definitiva, la auténtica reina de Egipto porque constituye la apuesta de JULIO CÉSAR. A la menor de las hijas de TOLOMEO XII, Arsinoe, en cuyo nombre ha iniciado su tiránico reinado Ganómedes, la manda expulsar del reino enviándola a Roma.