La muerte de Fernando de la Cerda plantea pronto un grave problema sucesorio en la Corona de Castilla.


En estas circunstancias, la muerte de Fernando de la Cerda plantea pronto un grave problema sucesorio. Por una parte está SANCHO, hermano de Fernando, e hijo mayor en aquellos momentos, por tanto, de ALFONSO X, vencedor de la reciente campaña contra los benimerines, cabeza de un fuerte partido y representante de un castellanismo a ultranza enfrentado al poderío francés. Por otra parte, están los hijos de Fernando de la Cerda, ALFONSO y FERNANDO (Conocidos como los infantes de la Cerda), herederos legítimos según la doctrina asentada en Las Partidas y nietos de S.Luis de Francia (ya que su madre Blanca, es hija del rey francés), lo que les convierte en representantes de la política francesa. La lucha por la sucesión en Castilla se endurece y se produce una serie de ejecuciones entre los implicados en una y otra facción.