NESTORIO no acepta las conclusiones del Concilio Ecuménico de Éfeso.


En el I Concilio ecuménico de Éfeso, se componen, bajo la inspiración de CIRILO de Alejandría, los célebres «Doce Anatematismos». Aprobados como resumen de la doctrina católica opuesta a los errores de NESTORIO, son enviados inmediatamente a éste, con la orden expresa de que los suscriba, conminándole a abjurar, por escrito, de su doctrina en el perentorio plazo de diez dias. NESTORIO se niega. Tras el concilio, los seguidores de NESTORIO huyen a Persia y más tarde se propagan por la India y China. (Actualmente la iglesia Nestoriana sobrevive en India, Turquía, Irán, Irak, Siria y en los Estados Unidos, en donde reside su patriarca en la ciudad de San Francisco.)