Hasta el inicio de 1945 el Frente Oriental se ha mantenido relativamente estable.


Hasta el inicio de 1945 el Frente Oriental se ha mantenido relativamente estable desde agosto de 1944 tras las consecuencias de la Operación Bagration. Rumania y Bulgaria han sido forzadas a rendirse y declarar la guerra a Alemania, y además los alemanes han perdido Budapest y la mayor parte de Hungría. De esta manera la llanura polaca es abierta al Ejército Rojo. Los comandantes soviéticos, después de su inacción durante el Alzamiento de Varsovia, avanzan finalmente sobre la capital polaca en enero de 1945. Durante 3 días, en un amplio frente, cuatro ejércitos soviéticos comienzan una ofensiva a través del río Narew y desde Varsovia. Después de cuatro días de lucha el Ejército Rojo logra vencer la resistencia alemana y comienza a moverse hacia el oeste, recorriendo hasta 40 kilómetros por día, tomando los estados bálticos, Danzig o Gdansk, Prusia del Este, Pozna, trazando un nuevo frente a solo sesenta kilómetros al este de Berlín, a lo largo del río Óder.