En los Juegos Istmicos, se proclama la libertad de todos los estados griegos.


En los Juegos Istmicos, el cónsul victorioso en la Segunda Guerra macedónica, TITO QUINTO FLAMINIO, que ha vencido a FILIPO V de Macedonia, proclama la libertad de todos los estados griegos, aunque en realidad pasan de la hegemonia macedónica a la romana. En efecto, la primera muestra que dan las ciudades griegas de su «libertad» consiste en rogar a Roma que acabe con NABIS, el generoso Tirano de Esparta, que ha desligado a los esclavos de su servidumbre pero ha luchado unido a FILIPO de Macedonia contra los romanos. Obligados por esta petición, los romanos expulsan a NABIS de Esparta, y esta ciudad deja de ser un Estado independiente.