CARLOS V -a través de su hermano FERNANDO- se ve obligado a firmar, en la fecha, la «Paz de Augsburgo».


De hecho, CARLOS V -a través de su hermano FERNANDO- se ve obligado a firmar la «Paz de Augsburgo», al haberse aliado los protestantes de Alemania con ENRIQUE II de Francia que significa la división religiosa de la Europa Central. Este Tratado es declarado ley imperial, obligatoria para todos. Este acuerdo significa el abandono por parte del Emperador de imponer el catolicismo como religión única en Alemania y el fracaso de toda su política bélica y religiosa. Fracaso ya reconocido previamente por CARLOS V. A los cuatro meses de acceder al papado, PABLO IV firma también la «Paz de Augsburgo».