LEOVIGILDO promulga el “Códex Revisus”, primera gran obra legislativa del Reino visigodo español. Es una revisión del antiguo Código de EURICO, en la que se corrigen aquellas leyes que se consideran confusamente redactadas, se añaden muchas olvidadas y otras nuevas y se suprimen las superfluas. Parece que la legislación de este “Códex Revisus” es de aplicación general, como acredita el hecho de que sus leyes, representen la mitad del contenido de un código de carácter territorial tan inequivoco como sería el futuro “Liber Iudiciorum” de Recesvinto.

La vieja Cantabria romana, que ocupa el territorio que se extiende entre las fuentes del Ebro y la costa, desde la disolución del poder provincial romano en la Tarraconense y la Cartaginense, vive una existencia independiente del mandato de los visigodos gobernada por una asamblea de notables indígenas. La campaña de LEOVIGILDO del año 574 culmina con la ocupación y saqueo de Amaya, capital del territorio cántabro y el asesinato de la mayor parte de su Senado. Amaya queda como centro desde donde lanzará futuras expediciones, ya que vascones y cántabros siguen manteniendo su independencia.

Campaña de LEOVIGILDO, contra el suevo MIRO que ha apoyado a los vascones en su lucha contra el rey visigodo.

LEOVIGILDO, rey de los visigodos, procede, en la fecha, a la conquista de Oróspeda (Sierra de Cazorla) donde todavía se resisten algunos hispanorromanos y bizantinos.

El año 578 puede ser considerado como el más importante del reinado de LEOVIGILDO. La paz reina en todo el territorio tras prolongados esfuerzos. La fundación de la ciudad de Recópolis, llamada así en homenaje al príncipe RECAREDO, hijo de LEOVIGILDO, es el símbolo luminoso de este momento. Recópolis se construye también como un bastión militar y como núcleo de la autoridad visigoda en Celtiberia. La ciudad se sitúa sobre la colina del Cerro de la Oliva, mirando al Tajo, al sur del futuro pueblo de Zorita de los Canes.

LEOVIGILDO, deseoso de poner fin a la violenta situación familiar desatada entre su segunda esposa GOSWINTHA (fiel seguidora de la doctrina arriana) e INGUNDA (de origen franco, esposa del príncipe HERMENEGILDO y firme católica convencida de su fe) resuelve alejar de la Corte a los príncipes, nombra a su hijo HERMENEGILDO duque de Andalucía y le confía el gobierno de la Bética. En Sevilla el ambiente es totalmente católico, al contrario que en Toledo. HERMENEGILDO no tarda en abrazar el cristianismo (580), tomando el nombre de Juan, impulsado por LEANDRO, futuro obispo de Sevilla. (Algunos autores defienden que LEOVIGILDO había estado primeramente casado con TEODOSIA la cual como sus ilustres hermanos, LEANDRO e ISIDORO, profesaba el catolicismo. HERMENEGILDO, en este caso, hubiese estado educado desde la niñez en el catolicismo.

Concilio arriano en Toledo en el que se marcan las condiciones para que los católicos pasen al arrianismo. Trata con ello de minimizar las diferencias entre los dos credos y de dar facilidades para aquellos que quieran abrazar el credo arriano. Empieza una campaña de persecución, principalmente contra los obispos. Destierra a algunos, entre ellos al célebre Massona de Mérida. Algunos obispos abrazan el arrianismo. Lo hacen (Vicente de Zaragoza y Nepopis de Mérida), pero la mayoría rechaza de lleno el juego de LEOVIGILDO.

LEOVIGILDO quiere cimentar la unificación política de su reino en la unión religiosa de todos los hispanos en el arrianismo. Para ello convoca un sínodo arriano en Toledo.

Ante la actitud hostil hacia el catolicismo que muestra LEOVIGILDO, HERMENEGILDO, su hijo convertido al catolicismo, se rebela contra su padre porque éste intenta someter a los grupos católicos hispanorromanos del sur . El levantamiento de HERMENEGILDO es respaldado por la provincia de la Bética, tradicionalmente opuesta al gobierno visigodo, y gobernada ahora por el propio HERMENEGILDO.

LEOVIGILDO se lanza contra los vascones, que han llegado hasta Rosas. Tras expulsarlos de la ciudad gerundense, invade su territorio, se apodera de parte de él y funda la ciudad de Victoriaco =Vitoria. Esta fortaleza colaborará con la de Amaya para futuras expediciones contra los vascones y cántabros.