ORDOÑO IV el Malo (Rey de León)(958-960)

Total de piezas: 6

Fernán GONZÁLEZ reúne las voluntades de los condes gallegos y castellanos en contra de SANCHO I.


Aprovechando la ausencia del rey SANCHO I el Craso, Fernán GONZÁLEZ reúne las voluntades de los condes gallegos y castellanos a favor del príncipe ORDOÑO, hijo de ALFONSO IV, y en contra de SANCHO I, y se dispone a derrocar al monarca leonés. Para asegurar su posición, Fernán GONZÁLEZ casa a su hija Urraca -viuda de ORDOÑO III- con el príncipe ORDOÑO (956). Ante la noticia de que su yerno pretende repudiar a su hija para casarse con una hermosa gallega, Fernán GONZÁLEZ hace saber al príncipe ORDOÑO que, automáticamente, prestará su apoyo al otro candidato si sucede tal cosa. ORDOÑO cambia de opinión al saberlo.

SANCHO I no puede hacerse con el control de la situación en León. ORDOÑO IV es elegido rey de León.


Tras ser reconocido y proclamado el príncipe, ORDOÑO IV el Malo o el Jorobado, como nuevo rey, se entabla la guerra entre los partidarios de ambos bandos. Finalmente en la primavera de 958, SANCHO I que ha tenido que regresar rápidamente de Córdoba, no puede hacerse con el control de la situación y pese a la ayuda que le presta Pamplona, cada vez más deseosa de hacer sentir su influencia sobre León, debe huir y refugiarse en Pamplona.

Es conquistada Zamora y el ejército de SANCHO I se dirige hacia la capital.


Con el ejército musulmán y ayudado por los condes VELA y ANSÚREZ, SANCHO I el Craso se dirige contra ORDOÑO IV en tanto las tropas pamplonesas entran en Castilla. Es conquistada Zamora y el ejército de SANCHO I se dirige hacia la capital. En el transcurso de la lucha es decisiva la ayuda de los señores gallegos que, en esta ocasión, se ponen al lado de SANCHO, tal vez porque ORDOÑO IV ha resultado ser un señor aún peor que éste.

Fernán GONZÁLEZ es derrotado en Cirueña, y hecho prisionero por GARCÍA I Sánchez de Navarra.


Fernán GONZÁLEZ se queda solo en su defensa de ORDOÑO ante navarros y cordobeses. Derrotado en Cirueña, es hecho prisionero por GARCÍA I Sánchez de Navarra, y encarcelado en Clavijo.

Liberado Fernán GONZÁLEZ por el rey pamplonés, presta homenaje a SANCHO I .


Liberado Fernán GONZÁLEZ por el rey pamplonés, presta homenaje a SANCHO I y, al regresar a Burgos, expulsa de allí a ORDOÑO IV a quien obliga a separarse de su mujer y de sus hijos y a abandonar la capital castellana. ORDOÑO IV pide entonces refugio en Medinaceli para de allí pasar a Córdoba. SANCHO I tiene entonces que enfrentarse a la amenaza de que AL-HAKAM apoye a ORDOÑO IV en un nuevo intento de hacerse con el trono, por lo que envía a Córdoba una embajada ofreciendo el cumplimiento de lo acordado en el tratado.