El bombardeo de Gran Bretaña desde el aire es terrible, pero aún es peor el hundimiento de barcos mercantes. En 15 de agosto de 1940 son hundidos 2,5 millones de toneladas. A pesar de que algunos barcos noruegos y daneses se han unido a los británicos, y de que los franceses están fuera de combate, la marina británica va mermando, y parece que el país va a padecer hambre mucho antes que Alemania. Lo que al menos temporalmente salva la situación, es un acuerdo por el que los Estados Unidos transfieren 50 viejos destructores a Gran Bretaña.

La ofensiva alemana sobre Gran Bretaña continúa su curso con excelentes resultados hasta que el 24 de agosto de 1940 los puertos de Londres son bombardeados por error. Pese a las disculpas alemanas (aún no están en tiempos de guerra total, y se siguen ciertas reglas de honor), CHURCHILL aprovecha el error preparando un ataque aéreo sobre Berlín. Este bombardeo será más que nada un golpe de efecto para subir la moral británica, ya que la RAF no está aún en condiciones de realizar un verdadero ataque sobre suelo alemán.

Con la inmensa presión ejercida por la Luftwaffe sobre los aeródromos británicos, el poder de fuego de la RAF es ínfimo. La fecha del bombardeo de Berlín será escogida con mucho cuidado, haciéndola coincidir con la entrevista del ministro de Asuntos Exteriores del Reich, Joachim von Ribbentrop, en Berlín con su homólogo soviético, Molotov, para demostrar a la Unión Soviética el triunfo alemán y realizar nuevos acuerdos. La entrevista deberá interrumpirse para bajar a un refugio antiaéreo, lo que será motivo para que Molotov no de crédito a las palabras de von Ribbentrop: «En vista de lo que está cayendo del cielo de Berlín, no parece normal que los ingleses estén en las últimas»).

Tras la derrota de Polonia, la Unión Soviética obliga a Rumania a ceder la provincia de Besarabia (Rumania se había anexionado esta provincia en 1918, cuando Rusia estaba demasiado absorbida en la resistencia a la Revolució En la fecha, la mitad septentrional de Transilvania es devuelta a Hungría.

Empieza el «Blitz», bombardeo sostenido de la aviación nazi sobre las ciudades británicas, que tiene lugar entre el 7 de septiembre de 1940 y el 16 de mayo de 1941, y cuyo objetivo es la población civil. Aunque este cambio de táctica en la guerra aérea implica casi la destrucción de Londres, CHURCHILL está dispuesto a afrontar el sacrificio a cambio de que la RAF tenga el tiempo necesario para rearmarse. Si bien las bajas alemanas no son particularmente cuantiosas mientras que sí lo son las británicas, la sensación es que Alemania está perdiendo la batalla. Los bombarderos alemanes encuentran cada vez más resistencia, al no contar sistemáticamente con la protección de los cazas, dada su baja autonomía de vuelo para poder cumplir sus misiones y a que la moral británica no se resquebraja.

Ante el fracaso de la Luftwaffe en despejar los cielos de la RAF, Alemania pospone indefinidamente la invasión de Gran Bretaña. Por otra parte, si bien los daños del bombardeo de Berlín han sido prácticamente irrisorios (al menos comparados con los daños en suelo británico) HITLER, herido en su orgullo, ordena a la Luftwaffe abandonar la estrategia de bombardeos a aeródromos británicos para concentrarse en las ciudades; principalmente sobre Londres.

La campaña en África del Norte es muy importante estratégicamente para el Eje y los Aliados. Los Aliados usan la campaña como un acercamiento a un segundo frente de lucha contra el Eje de la Fortaleza Europa, y ayuda a disminuir la presión en el frente ruso. El Eje ha planeado dominar el Mediterráneo a través del control de Gibraltar y del Canal de Suez, y al emprender una exitosa campaña en África del Norte donde, atacando septentrionalmente, se apodere de los ricos pozos de petróleo del Medio Oriente. Esto cortaría los abastecimientos de petróleo más cercanos a los Aliados, y aumentaria los disponibles para el funcionamiento de la maquinaria de guerra del Eje. El 13 de septiembre de 1940, en consecuencia, los italianos lanzan a su 10° Ejército, compuesto de unos 250.000 hombres, contra el Egipto controlado por los británicos que montan fuertes defensas en Sidi Barrani. El 10º Ejército no está muy mecanizado y el general italiano Graziani, al no tener información sobre el estado de las fuerzas británicas decidirá no continuar hacia El Cairo (12/1940).

Día tras día, los bombarderos y cazas alemanes convergen sobre Londres, y día tras día despegan los aviones británicos para enfrentarse a ellos. Londres sufre terribles estragos, pero el espíritu británico permanece inquebrantable bajo los bombardeos, y hace pagar un elevado tributo a los alemanes en aviones y pilotos. El peor ataque tiene efecto el 15 de septiembre de 1940, cuando más de un millar de bombarderos y 700 cazas se lanzan sobre Londres. Pero las pérdidas de aviones alemanes superan en una proporción de dos a uno las de los británicos.

Aunque Serrano no era ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno español, se le envía a la cabeza de una delegación española a Berlín. Entre el 15 y el 25 de septiembre Serrano mantiene largas conversaciones con Ribbentrop y dos más breves con Hitler. El resultado es la decepción de Serrano ante la negativa de Hitler a comprometerse a nada, ni en relación al envío de provisiones ni referente a la anexión de territorios. Ribbentrop incluso exige la cesión de una de las islas Canarias para una base naval alemana.

En 1940, Japón, aprovechándose de la nueva contienda europea, se lanza sobre Indochina ocupando bases aéreas y navales es su parte sudoriental. Francia cede a las peticiones japonesas de bases aéreas en Indochina meridional. El nacionalismo indochino reaparece ante la nueva situación.