Publio Elio ADRIANO, senador hispano, de origen bético, nacido en 76 dC y primo de Trajano que le había adoptado como sucesor, es nombrado emperador romano (117-138). Durante el período de Trajano y de Adriano, los hispanorromanos constituyen prácticamente la cuarta parte de las nuevas admisiones al senado romano. ADRIANO promocionará la ciudad de Itálica, de donde era originario, al rango de colonia.
ADRIANO (Emperador romano)(117-138)
Total de piezas: 16
ADRIANO se retira voluntariamente de aquellas regiones por las que Roma se ha extendido en demasía.
De personalidad polifacética y dotado de las más altas cualidades de hombre de estado, al mismo tiempo poeta, artista y filósofo, ADRIANO al acceder al poder se encuentra con una grave situación: el Oriente devastado por la rebelión judía, la amenaza bárbara, el tesoro vacío, pese al aumento de los impuestos. ADRIANO no duda en abandonar el expansionismo de Trajano. Durante su reinado, el Imperio pasa definitivamente a la defensiva. El ejército, reorganizado y sometido a constante entrenamiento, tiene por misión exclusiva la vigilancia del limes. ADRIANO se retira voluntariamente de aquellas regiones por las que Roma se ha extendido en demasía, así, abandona el valle del Tigris-Éufrates, y le permite regresar al dominio parto. Armenia también es abandonada pero en situación de vasallaje.
ADRIANO restaura el equilibrio financiero, e inicia una expansión del burocratismo.
En el Imperio romano, la reactivación económica es una necesidad imperiosa, pues de lo contrario el Estado se verá abocado a aumentar los impuestos y devaluar la moneda. ADRIANO restaura el equilibrio financiero, y decide resolver el problema de las ingentes deudas que se deben al Estado mediante un decreto que las elimina y, en la fecha, manda quemar públicamente todos los registros y archivos de deudores. Con el objetivo de mejorar los servicios administrativos, incorpora a los caballeros -la segunda categoría de ciudadanos, tras los senadores- a los cargos más relevantes, eliminando definitivamente la presencia de libertos, hacia los que siente un profundo desprecio. Crea también un cuerpo de auditores fiscales para que supervisen las contabilidades de las provincias. Este conjunto de medidas constituyen el inicio de la expansión del burocratismo, que con el paso del tiempo generará graves problemas.
ADRIANO inicia su primer viaje de inspección por el norte del Imperio.
Administrador tan cuidadoso para el detalle como para el conjunto, ADRIANO quiere darse cuenta por sí mismo del estado de las provincias. En la fecha, inicia su primer viaje de inspección (121-125) por el norte del Imperio. De estos viajes resultarán numerosas reformas que a la larga supondrán una injerencia creciente del estado en la vida local.
En Britania, el emperador ADRIANO manda construir una muralla de más de cien kilómetros.
Aunque la conquista de Britania por los romanos, pudo considerarse ultimada en el año 85 dC., Roma en aquellos años no se apoderó totalmente del archipiélago británico; se limitó a la isla mayor, y no a toda ella, sino sólo a la parte comprendida, aproximadamente, en los límites de la actual Inglaterra. Pero los romanos trajeron todas las ventajas de una civilización altamente desarrollada. Construyeron una red de calzadas, ciudades, villas, palacios, baños y presidios. Con ocasión en 122 dC de su visita de inspección a Britania, el emperador ADRIANO manda construir una muralla de más de cien kilómetros, conocida como «Muralla de Adriano». Se construirá en cinco años, tendrá 19 fuertes y se extenderá a lo largo de 52 km. en el punto más estrecho de la isla de Britania, desde la desembocadura del Tyne al golfo de Solway, para impedir las incursiones de pictos y caledonios. Esta muralla constituye un indicio de que los romanos no emprenderán ningún serio esfuerzo para avanzar más al Norte.
Nuevo viaje del emperador romano ADRIANO por las diferentes provincias del sur del Imperio.
Un segundo gran viaje de inspección (128-134) del emperador romano ADRIANO, esta vez por las diferentes provincias del sur del Imperio -Grecia, Asia Menor, Egipto-, se ve jalonado por la construcción de nuevas ciudades, acueductos, templos, bibliotecas, teatros y carreteras, como resultado de la fiebre constructora que parece dominarle.
ADRIANO, admirador de la filosofía y literatura griegas, adquiere a un hermoso joven: Antínoo.
ADRIANO, admirador de la filosofía y literatura griegas, en Grecia adquiere a un hermoso joven, a quien convierte en su ayuda de cámara, llevándole a Egipto, en el año 130. Cuando este joven, llamado Antínoo se ahogue en el Nilo, el emperador, vivamente afectado, decretará que sea adorado como un nuevo dios, se le dedique un templo, unas estatuas y se le consagre una nueva ciudad: Antinópolis. Para ADRIANO, aquel joven representaba la belleza y virilidad del helenismo.
Cuando ADRIANO, en su segundo viaje de inspección, llega a Judea, Jerusalén sigue en ruinas.
Cuando ADRIANO -en su segundo viaje de inspección- llega a Judea, en el año de la fecha, Jerusalén sigue en ruinas. Los judíos esperan que reconstruya el Templo de Salomón (y de Herodes), pero el propósito de ADRIANO es crear en Jerusalén la colonia Aelia Capitolina, prohibida a los judíos, y que pertenecerá a la provincia procuratorial de Palestina. El viejo templo destruido será reemplazado por uno nuevo dedicado a Júpiter.
Se crea el «Edicto Perpetuo», aplicable en todo el Imperio. (Recopilación de los edictos existentes)
ADRIANO consciente de que todo buen gobierno sólo es viable si posee leyes correctas y jueces justos, encomienda a Salvius Julianus -un joven abogado de brillante carrera- la tarea de crear un código de la ley romana, recopilando todos los edictos existentes. El resultado es el «Edicto Perpetuo», aplicable en todo el Imperio. Es publicado en el año de la fecha.
Los habitantes de Judea, se disponen de nuevo a empuñar las armas contra los romanos.
Debido a la política romanizadora del emperador ADRIANO en Judea, los habitantes de ésta, se disponen de nuevo a empuñar las armas contra los romanos, a pesar de las extraordinarias pérdidas sufridas hace sesenta años cuando Tito arrasó la ciudad de Jerusalén. Estalla, en consecuencia, una revuelta en Jerusalén contra los romanos -Segunda sublevación (132-135) al frente de la cual está Simón Bar KOKEBA («Hijo de una estrella»).