En 1926 se crea en Túnez el Instituto Pontificio para los Estudios Árabes e Islámicos, transformado el 19 de abril de 1960 en Instituto Pontificio de Estudios Orientales y luego en 1964, trasladada su sede a Roma, se convierte en el Instituto Pontificio para los Estudios Árabes – más conocido por sus iniciales en italiano, Pisai-; lugar de estudios universitarios reconocido internacionalmente.

En la declaración del Concilio Vaticano II, Nostra aetate, se puede leer en relación a los musulmanes: La Iglesia mira también con estima a los musulmanes. (…) El santo Concilio exhorta a los cristianos y a los musulmanes a olvidar el pasado y a esforzarse sinceramente en la comprensión mutua.

Pablo VI crea una comisión para las relaciones religiosas con los musulmanes, que se vincula al Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso creado por el Papa en el año 1964.

Visita de Juan Pablo II a la mezquita de los Omeyas en Damasco: “Es capital enseñar a los jóvenes el camino del respeto y la comprensión, a fin de que no sean conducidos a hacer un mal uso de la religión para promover o justificar el odio y la violencia (…) Una mejor comprensión mutua conducirá seguramente, en la práctica, a una nueva manera de presentar nuestras dos religiones no como opositoras, como ha sucedido demasiado a menudo en el pasado, sino asociadas por el bien de la familia humana”.

“Es importante tener una justa relación con el islam”. “Esta relación debe ser conducida con prudencia, es necesario conocer claramente las posibilidades y límites, y tener confianza en el propósito de salvación de Dios, que concierne a todos sus hijos”. (Declaración final del sínodo). Hay que ser consciente, entre otras cosas, de la divergencia notable que hay entre la cultura europea, que tiene profundas raíces cristianas, y el pensamiento musulmán”.

Pese al intento de BENEDICTO XVI de explicar a los secularizados países occidentales por qué a su juicio el islam les teme y detesta, unas reflexiones del Papa sobre Mahoma y la yihad han causado una oleada de indignación en el mundo musulmán que ha obligado al Vaticano a aclarar la intervención papal. Esta reflexiones se contienen en un erudito discurso, dedicado a analizar la relación entre razón y fe. El Papa cita un diálogo del siglo XIV entre el emperador bizantino Manuel II Paleólogo y un persa muy culto, en el que se habla de la yihad. Benedicto XVI recuerda que el Corán la predica y al tiempo la desautoriza, pues Mahoma llama a no obligar a nadie a convertirse por la fuerza. El Papa concluye que, como decía el emperador, “difundir la fe con violencia es irracional”, porque “actuar irracionalmente es contrario a la naturaleza de Dios”; y da a entender que en el Dios cristiano está presente la razón, mientras que el Dios islámico es tan trascendente que “su voluntad no está ligada a ninguna de nuestras categorías, ni siquiera a la racionalidad”.

BENEDICTO XVI culmina su viaje de seis días a su Baviera natal, en el que varios de sus discursos han incluido llamamientos a que la sociedad moderna no deje que su fe en la razón la aparte de Dios, pues tal desapego a lo divino es lo que más horroriza de Occidente a las otras religiones del mundo.

Viaje a Turquía -donde sólo hay unos 35.000 católicos- de BENEDICTO XVI. (Del 28/11 al 1/12). Viaje que se considera el más arriesgado de los llevados a cabo por los últimos papas. El día 30 es la solemne festividad de San Andrés que es el patrón de la Iglesia ortodoxa. El papa ha sido invitado a Turquía antes de que estallara la polémica por el discurso papal de Ratisbona del pasado septiembre.

El viaje de BENEDICTO XVI a Turquía termina hoy con la impresión general de que la visita ha contribuido a serenar los ánimos entre la Santa Sede y el islam. En su último día en Estambul, el Pontífice ha celebrado una misa en la que ha abogado por la libertad religiosa de las minorías, y ha dicho que “la Iglesia no quiere imponer nada a nadie”.

Entrevista entre el actual Sumo Pontífice de la Iglesia católica, Benedicto XVI (80 años), y el rey de Arabia Saudí, Abdulah (83). Aunque el soberano árabe no es la máxima autoridad del islam, ya que esta religión no prevé esta circunstancia, sí que es el guardián de dos santos lugares musulmanes – La Meca y Medina-, y el encuentro que ambas personalidades han sostenido en el Vaticano es histórico, pues es la primera vez que dignatarios de tan alto nivel de las dos religiones con más fieles mantienen un diálogo: en el mundo hay 1.100 millones de católicos y 1.280 millones de musulmanes. Abdulah estuvo en el Vaticano en 1999 cuando era príncipe heredero. Ambos estados no mantienen relaciones diplomáticas.