Fuerzas navales inglesas atacan Zeebrugge (Bélgica), donde existe una base submarina alemana, y bloquean el canal de la Mancha.

El 27 de Mayo se lanza el tercer gran ataque, codificado por los alemanes como Blucher-Yorck y conocido como tercera batalla del Aisne, entre Soissons y Reims. El frente aliado se colapso tras la barrera de fuego artillero y los alemanes avanzaron siguiendo el Marne, Paris parecía al alcance de la mano, sin embargo las ametralladoras americanas y los tiradores senegalesesdetuvieron el avance en Chateau-Thierry. Dentro de esta ofensiva los americanos consiguieron su primera victoria en la batalla de Cantigny el 28 de Mayo. El ataque se dio por finalizado el 6 de Junio con 137.000 bajas aliadas y 130.000 alemanas.

La apertura del frente alpino no ha debilitado la defensa austríaca. Todo lo contrario, los austro-alemanes obligan a los italianos a retroceder hasta Piava y a abandonar Venecia. Por otra parte, los austriacos, liberados ahora del frente oriental, cuentan con nuevos refuerzos y deciden atacar. Los italianos se enteran de la hora del ataque y los reciben con una cortina de artillería. A pesar de todo logran avanzar pero el día 17 se ven obligados a retirarse, es entonces cuando se encuentran con el río crecido y con dificultades para retornar a su orilla, los aliados lo aprovechan y les inflingen severas bajas. Para cuando finaliza la batalla el 22 de Junio los aliados tienen 87.500 bajas, los austriacos han sufrido 125.000 bajas y otros 25.000 hombres han sido capturados.

El 21 de Agosto de 1918, británicos y franceses lanzan una ofensiva conocida como segunda batalla del Somme que empuja a los alemanes desde su posición actual hasta la línea Hindenburg.

Los alemanes van retrocediendo sobre la línea Hindenburg, mientras intentan establecer dos nuevas líneas a retaguardia: la llamada «Hermann-Stellung» y la posición «Amberes-Mosa».

Entre el 27 de Septiembre y el 17 de Octubre los británicos y franceses lanzan una ofensiva en todo el frente y en ese periodo consiguen alcanzar y sobrepasar la línea Hindenburg por varios puntos capturando a más de 35.000 alemanes en Verdun.

Los belgas, bajo el mando del rey Alberto, atacan desde Yprés hasta el mar, ganando varios kilómetros, y empujando hacia atrás el frente alemán.

Nombramiento del gobierno del príncipe Max von Baden. Consciente del agotamiento a que ha llegado Alemania, firma con los aliados la capitulación mientras la opinión pública cree que la victoria es inminente. Von Baden y su equipo serán denominados «los criminales de noviembre».

En la fecha, el mando alemán de la guerra naval, da orden a la flota de alta mar de partir para el último combate contra la armada inglesa. Sin embargo los marineros no quieren seguir siendo carne de cañón e intentan un levantamiento que se extiende rápidamente a los trabajadores y a los soldados hasta convertirse en la «revolución de noviembre».

Una expedición naval desembarca en Trieste el 3 de noviembre y captura la ciudad. En esta misma fecha, Austria-Hungría se rinde en el armisticio de Villa Giusti, dejando que Alemania luche sola una semana más. Destierro vergonzoso a Madeira de CARLOS I de Austria y IV de Hungría, escoltado por la marina británica. A diferencia de la familia imperial de Prusia, CARLOS I abandona el país sin ninguna fortuna. La emperatriz viuda y sus hijos podrán sobrevivir gracias a la ayuda material de ALFONSO XIII que les ofrecerá alojamiento en Lequeitio. Mientras tanto, en la misma fecha, estalla en Alemania una revolución y la flota se amotina cuando sus jefes intentan hacerla salir para atacar a la escuadra inglesa. Los aliados se disponen a asestar el golpe de gracia invadiendo Alemania por Alsacia y Austria. No iba a ser necesario.