Los catalanes derrotan a los tercios castellanos en la «batalla de les Forques», cerca de Lleida, durante la «Guerra dels Segadors». A pesar de la victoria, la fortaleza de Lleida caerá al año siguiente en manos del ejército de FELIPE IV.
FELIPE IV el Grande (Rey de España)(1621-1665)
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Francia derrota a los tercios españoles en Rocroi (Las Ardenas-Francia)
Francia apoya las sublevaciones de Portugal y Catalunya en España y, en la fecha, derrota a los tercios españoles en Rocroi (Las Ardenas-Francia).
FELIPE IV ordena al conde-duque de OLIVARES que salga de Madrid y se retire a sus fincas de Loeches.
En la fecha, FELIPE IV ordena al conde-duque de OLIVARES que salga de Madrid y se retire a sus fincas de Loeches. Esta caída es fruto de una conspiración palaciega, pero ya desde 1640 el rey dirige más de cerca los asuntos de Estado. Retirada la confianza del rey al conde-duque de OLIVARES, la guerra de Catalunya podría haberse terminado en este momento, pero Catalunya encegada en su afán reivindicativo no sabe encontrar la salida política. No obstante, habiéndose mostrado FELIPE IV decidido a respetar a partir de este momento las libertades de Catalunya, la resistencia disminuye.
En Catalunya, en la misa muchos curas piden por el rey, lo que era un modo de referirse a FELIPE IV.
Todo ello hace que se endurezcan las medidas de seguridad en el interior de Catalunya, lo que, a su vez, aumenta el descontento de su gente. El clero, por lo general, fomenta esa actitud. En la misa muchos curas piden por el rey, sin decir cual, lo que era un modo de referirse a FELIPE IV. Los franciscanos disimulan menos, pues, en sus sermones, amenazan con el infierno a cuantos no le acaten. Las autoridades de ocupación tienen que expulsar a muchos clérigos, incluido el obispo de Vic, Ramón de Sentmenat. También piensan en traer sacerdotes de Francia para sustituir a los de Catalunya.
En Catalunya, el ejército mercenario francés es un verdadero ejército de ocupación.
En Catalunya, el ejército mercenario francés es un verdadero ejército de ocupación, por lo que la población no halla diferencia entre la conducta de las tropas francesas y las españolas.
Los franceses se han hecho con las riendas del poder en Catalunya, instaurando una verdadera dictadura.
Los franceses se han hecho con las riendas del poder en Catalunya, instaurando una verdadera dictadura. Habiendo fallecido Pau CLARIS, no les es difícil que unas autoridades complacientes, habiendo fallecido, también, LUIS XIII, rey de Francia, proclamen, en la fecha, conde de Barcelona a su hijo, el nuevo rey de Francia LUIS XIV. Catalunya se convierte, así, en una provincia francesa, lo que hace que más catalanes se sumen a los que ya figuraban en el ejército real. El resto de la población les va creando a los ocupantes problemas cada vez mayores. Ellos mismos atizan el fuego con la arbitrariedad de su gobierno y con el comportamiento de sus tropas, peor que el de los mercenarios de FELIPE IV.
Se abre en Francia una grave crisis política, que favorecerá en España a la causa de FELIPE IV.
Tras la muerte de Luis XIII, Francia proclama Rey a su hijo de cinco años, LUIS XIV. Reinará bajo la regencia de su madre ANA de Austria (española, hija de FELIPE III y hermana, por tanto, de FELIPE IV) y un primer ministro extranjero, el cardenal MAZZARINO. Se abre en Francia una grave crisis política, que favorecerá en España a la causa de FELIPE IV.
Los españoles cruzan la frontera y se dirigen hacia París pero son exterminados en Rocroi.
Los españoles se disponen a sacar ventaja de la muerte del cardenal RICHELIEU y del rey LUIS XIII, dando por sentado que Francia se sumirá en una situación próxima a la anarquía. En consecuencia, consideran que es un momento apropiado para invadir con el fin de aliviar la presión sobre el Franco Condado y Catalunya. Cruzan la frontera y se dirigen a París. Hacen una pausa para poner sitio a la ciudad de Rocroi (departamento de Ardenas, a 3 kilómetros de la frontera belga). El duque d’Enghien -francés- marcha hacia allí con rapidez. Su caballería derrota a la española, y queda la infantería, compuesta por 18.000 hombres, que durante siglo y medio había parecido invencible. Los ataques directos franceses fracasan, de modo que d’Enghien se retira y hace uso de su artillería, al tiempo que se apodera de los cañones españoles. Una vez que la infantería española está bien castigada, un avance francés la arrolla y prácticamente la extermina. Este hecho de armas señala el fin de la superioridad militar española, e inaugura un período en el que el ejército francés dominará Europa.
FELIPE IV, conoce a sor MARÍA de Agreda, famosa por sus cualidades de santidad. Se inicia una activa correspondencia.
Poco después, FELIPE IV, conoce a sor MARÍA de Agreda, famosa por sus cualidades de santidad y a partir de este momento se inicia una activa correspondencia entre el monarca y la monja, que se convierte en una especie de consejera privada del rey hasta su fallecimiento. En una de sus cartas, fechada el 13 de octubre de 1643, sor MARÍA de Agreda escribe al rey que tras la caída de OLIVARES, debe continuar ejerciendo sus funciones en persona y no distinguir especialmente a ningún ministro en particular. Para reforzar su advertencia, sor MARÍA da a entender que el incumplimiento de este deber divino, constituye un grave riesgo para el alma del monarca. El rey hace suyo el consejo.
Las instrucciones de MAZZARINO son incorporar el norte de Catalunya a la soberanía francesa.
En el Roselló, en el Conflent, las peticiones de ayuda a Barcelona no obtienen respuesta. Las relaciones entre Perpinyà (la segunda ciudad de Catalunya en aquellos momentos) y Barcelona, la capital, hace años que son tirantes, ya que el Roselló ha denunciado unos supuestas agravios por parte de la Diputación: abandonamiento de la defensa militar, presión fiscal asfixiante… Ahora que también Barcelona sufre directamente las consecuencias de la ocupación francesa es impensable que pueda hacer alguna cosa para ayudarlos. A finales de 1643 el cónsul de Perpinyà se dirige directamente a los ministros de París, pero nada más reciben buenas palabras. En realidad, las instrucciones de MAZZARINO son incorporar el norte de Catalunya a la soberanía francesa. Sobre el terreno, la fortaleza militar francesa declina; los españoles han reconquistado Lleida y el Roselló hierve de indignación.